La expresidenta Cristina Kirchner ha emitido duras críticas hacia las recientes decisiones del Gobierno, particularmente en lo que respecta a la indexación de las bandas cambiarias. En un mensaje difundido desde su domicilio en Constitución, donde cumple condena por el caso Vialidad, Kirchner afirmó: “Lo cierto es que la economía está en caída libre porque el consumo no repunta.”
Kirchner enumeró las diversas políticas monetarias anunciadas durante el mandato de Javier Milei, destacando su desconfianza hacia ellas. “En el 2023 fue la dolarización… ibas a recibir dólares en lugar de pesos por tu trabajo o tu salario. En el 2024, otra vez fue la dolarización, pero esta vez era endógena por competencia de monedas”, apuntó, indicando lo que considera un patrón errático en la gestión económica del actual gobierno.
En el 2023 fue la dolarización… ibas a recibir dólares en lugar de pesos por tu trabajo o tu salario.
En el 2024, otra vez fue la dolarización, pero esta vez era endógena por competencia de monedas… los dólares iban a salir de los colchones desplazando a los pesos.
En el 2025…
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) December 17, 2025
Cristina refutó las afirmaciones optimistas del gobierno diciendo que “los dólares no salen por las orejas, sino para afuera del país,” citando específicamente el aumento de importaciones y el turismo emisivo. “Desde que Milei asumió en diciembre de 2023 hasta octubre de 2025, la inversión extranjera directa tiene un saldo negativo de USD 1.327 millones”, enfatizó, revelando una preocupante tendencia en la economía.
Además, la exmandataria concluyó que “una cosa es hablar en la tele y otra cosa es sentarse en el sillón de Rivadavia y gobernar,” criticando la desconexión entre el discurso del gobierno y la realidad que enfrentan los argentinos en su día a día. También se refirió a las inconsistencias en los mensajes del presidente Milei, alertando sobre la perspectiva distorsionada que estos podrían generar en la ciudadanía.
En su mensaje, Kirchner incluyó reflexiones sobre su propio legado, recordando que “los registros más altos [de inversión] fueron durante los dos gobiernos que tuvo el honor de presidir.” Con una crítica sólida y fundamentada al rumbo actual del país, la expresidenta se posiciona como una voz relevante en el debate político, ofreciendo una oposición clara a la gestión actual.
