Choferes de colectivos escindidos de la UTA retomaron este martes desde las 8 los cortes de tránsito sobre la avenida General Paz, a la altura del barrio porteño de Liniers, y sobre el Puente Pueyrredón, en reclamo de vacunas contra el coronavirus y un incremento salarial.
Sobre Rivadavia, a la altura del barrio porteño de Liniers, hay un solo carril habilitado mano a Capital Federal, mientras la Prefectura y la Policía Federal montó un operativo en el Puente Pueyrredón, por lo que también se encuentra cortado el tránsito en este sector hacia la Ciudad.
La medida de fuerza comenzó en plena hora pico en Panamericana, a la altura de Ingeniero Maschwitz, y con piquetes en el Acceso Oeste, a la altura de avenida General Paz y Rivadavia. Además, se registraron disturbios con el personal policial en la subida a Mitre en el Puente Pueyrredón, en las cercanías del Bingo Avellaneda.
El conflicto se origina por la falta de un acuerdo salarial en las paritarias que comenzaron en enero y aún continúan sin definirse. Las protestas, llevadas adelante por una fracción que no responde a la conducción de la Unión Tranviarios Automotor, el sindicato de los choferes, reclama, además, aumento salarial, un plan de vacunación para los empleados del transporte, la equiparación salarial entre distintas categorías, el cumplimiento de los protocolos sanitarios para prevenir los contagios y cupo femenino en todas las empresas del transporte.
El reclamo de vacunas es compartido también por la conducción oficial de la UTA cuyo titular, Roberto Fernández, exigió un plan para inmunizar a los los choferes de colectivos, al afirmar de que se trata de una actividad considerada esencial.
En ese sentido, el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán adelantó hoy, martes 11 de mayo, que los choferes mayores de 40 años y con comorbilidades serán incorporados como prioritarios en los planes de vacunación de la Provincia.