El histórico ramal ferroviario que conectaba la Ciudad de Buenos Aires con la ciudad de Bahía Blanca fue suspendido de manera definitiva, según informó recientemente el medio local. Este trayecto, que durante años unió el centro del país con uno de los puntos más australes de la provincia, deja de operar oficialmente luego de que ya había cesado sus servicios en marzo de 2023.
En concreto, la empresa operadora decidió clausurar la estación Bahía Blanca Sud en julio del presente año, una decisión que implicó el traslado de custodia del edificio, que posee categoría de monumento histórico, a la fuerza policial federal. Por otro lado, el cierre definitivo del servicio provocó la pérdida de 17 puestos de trabajo, ya que los empleados que prestaban funciones en el ramal fueron desligados de sus tareas.
Hace 10 años trajimos trenes 0 km a Bahía Blanca.
Después el kirchnerismo en 2023 lo suspendió. Ahora Milei lo desmanteló y dejó a su gente sin trabajo.
Unos fueron inútiles; los otros, insensibles.
El resultado: Bahía Blanca sin tren. pic.twitter.com/BFJysUfDmb
— Florencio Randazzo (@RandazzoF) September 19, 2025
El detonante de la medida fue identificado en un accidente ocurrido a fines de septiembre: una formación que cubría el trayecto Tucumán-Buenos Aires sufrió un descarrilamiento en Santiago del Estero, lo que llevó a las autoridades a reforzar los controles y a evaluar con mayor rigor el estado de las líneas existentes. En consecuencia, se determinó que la continuidad del ramal Buenos Aires-Bahía Blanca ya no podía sostenerse bajo las condiciones vigentes.
Este ramal no es el único afectado: según el informe, ya son doce los servicios de tren de pasajeros —tanto de larga distancia como regionales— que han sido interrumpidos en los últimos meses. Entre ellos figuran recorridos tales como Buenos Aires-Córdoba, Buenos Aires-Tucumán y el regional Córdoba-Villa María. La conjunción de la baja demanda, los costos operativos elevados y el deterioro de vías y material rodante forman un combo que hace inviable el restablecimiento inmediato de varios de esos servicios.
Con el cierre del ramal Buenos Aires-Bahía Blanca se abre un capítulo de incertidumbre en la región afectada: pasajeros, comunidades intermedias del recorrido y la propia ciudad de Bahía Blanca pierden una vía de conexión que tenía también valor simbólico e histórico. La infraestructura ferroviaria, que había sido rehabilitada parcialmente en años anteriores, parece haber llegado a un punto de inflexión. La pregunta que queda es cuándo y cómo comenzará el proceso de restauración o reconversión de estos servicios, y si habrá decisión política y recursos para ello en el corto plazo.