Salvador Asprea, un niño de 5 años, quiso entrar a jugar a un área recientemente reinaugurada por el gobierno porteño y terminó con el cráneo quebrado luego de que un portón se le cayera encima. Los vecinos, denunciaron que ya habían pasado varios días fuera de las bisagras y sin fajas de seguridad pese a los reclamos.
El portón que pesa casi 200 kilos estaba ubicado en Eva Perón y Achavál y pertenecía al espacio que hacía poco tiempo había sido reinagurado por el gobierno de la ciudad en el marco de un plan de obras que luego, los vecinos, frenaron mediante una medida judicial.
El nene se salvó de milagro, fue atendido en la Clínica Santa Isabel y según indica el diario Tiempo Argentino, los padres ni siquiera recibieron ayuda para pagar los remedios y la atención del pequeño o un llamado de solidaridad.
Las obras en Parque Chacabuco comenzaron en 2009, por un valor de 99 millones de pesos. Los vecinos denunciaron el remplazo del espacio verde por cemento, el quite de luminarias históricas y la modificación del patrimonio entre otras irregularidades y finalmente un amparo frenó las obras, y a finales de junio, el juez Roberto Gallardo comenzó a citar a funcionarios macristas.
Anteriormente, legisladores de la oposición, en numerosas ocasiones, habían denunciado la falta de estudios previos de impacto ambiental y plan de obras a ejecutar.
Asimismo desde el Gobierno porteño ofrecieron "hacerse cargo de la compra de los medicamentos que necesita el nene (amoxicilina+clavulánico), pero me pidieron un tiempo para conseguirlos, cosa que mi nene no tiene así que se los compré yo".
"Salvador hoy se encuentra bien físicamente, pero porque tuvo suerte, ese es un lugar que se llena de chicos no hay que esperar que ocurran estos accidentes para arreglar las cosas" comentó la madre luego de enterarse que quitaron varias rejas "flojas" del parque.
Al momento, no hubo declaraciones oficiales del Gobierno de la Ciudad al respecto, ni se pudo tener contacto telefónico.