Las pilas poseen metales tóxicos y contaminantes, por eso, resultan un problema cuando dejan de ser utilizadas. Ahora, la Ciudad se hará cargo de las pilas de origen dudoso, recargables o baterías de celulares usadas para separar las que posean un alto nivel de toxicidad y disminuir la contaminación.
La iniciativa se comenzará a implementar a partir del próximo mes y las pilas se recibirán en todos los CGPC de la Ciudad. Además, desde el primero de febrero las empresas que importen y distribuyan pilas en la Ciudad, serán quienes deban hacerse cargo del destino de las pilas usadas, según informó la Agencia de Protección Ambiental.
"Hay una gran cantidad de pilas que ya pueden ir a la basura común" expresó Graciela Gerola, presidenta de la Agencia de Control Ambiental porteña. Y agregó, "pero como es difícil que las personas puedan determinar cuáles se pueden tirar y cuáles no, a mediados de noviembre vamos a lanzar una campaña y el Gobierno porteño se va a hacer cargo de todas", según informó Gerola a Clarín.



