Angelina Jolie no quiere convertirse en "la Madre Teresa de Hollywood", pero según declaraciones difundidas hoy, su participación en obras de caridad es lo que "tiene que hacer", y no cómo no hay más estrellas que mostrarse o ser más solidarios.
"Me parece bastante claro que soy una estrella de Hollywood, increíblemente privilegiada y por eso tengo que hacer algo contra la horrible injusticia de este planeta".
"Eso no quiere decir que yo quiera actuar como la Madre Teresa de Hollywood. Simplemente, quiero ayudar ahí donde hay pobreza. ¿Soy la única que piensa así?", se preguntó.
La actriz, de 31 años, embajadora de la ONU, insiste en que los famosos deberían decir o hacer lo que quieran sin tener que dar explicaciones de sus actos, que es lo contrario de lo que ahora está pidiendo.
"Creo en la gente debería poder hablar y actuar libremente, sin tener que justificarse a cada paso". Sin embargo, la comparación con la Madre Teresa de Calcuta acaso no sea la más feliz para su prestigio.
En la biografía no autorizada de la monja, escrita por el inglés Christopher Hitchens, se cuenta la verdad de la caridad que practicaba la señora. Parecen sacada de una película de villanas, tanto que al lado de ella, Bette Davis pasaría por "mi pobre angelito".