Más de cien jóvenes militantes del kirchnerismo con un perfil técnico-político se reunieron ayer en las instalaciones del SUTERH (Venezuela al 300) para debatir contenidos del proyecto político que integran desde cada una de sus experiencias, que incluía desde la gestión pública hasta organizaciones sociales o universitarias. Cada uno de ellos marcó con su exposición los principales lineamientos de discusión que luego se dieron en la división de temas que se trabajaron.
Luego de que el Diputado Nacional Remo Carlotto, encargado de la convocatoria, diera la bienvenida, y Víctor Santamaría, secretario general SUTERH y máxima autoridad de la casa, saludara la actividad, tomó la palabra la Lic. Mercedes Marcó del Pont, presidenta del Banco Nación. La misma desarrolló una introducción sobre los principales canales que diferencian esta coyuntura económica de la que venía viviendo el país desde décadas pasadas. Marcó del Pont expresó con respecto a las intervenciones: "Hoy podemos decir que nuestro gobierno tomó la decisión política de que sea el mercado interno el principal motor de crecimiento de este país".
Luego habló el Lic. Gabriel Mariotto, interventor del COMFER quien secundo a Marcó del Pont en las intervenciones. También se refirió a los desafíos comunicacionales que los militantes deben enfrentar con formación y claridad de argumentos a la hora de debatir las posiciones del gobierno con los sectores opositores, para esto marcó la necesidad de sumar militantes y avanzar en la calidad de su formación.
Finalmente, hizo referencia a la discusión coyuntural que se esta dando sobre la nueva Ley de Radiodifusión, que aseguró que va a servir "para que haya muchas más bocas que puedan expresarse, para que la nueva tecnología que nos trae la digitalización sea un resorte de la democratización, no un factor de la concentración. La falta de diversidad en los medios produce que haya un solo punto de vista".
Otros oradores fueron: El embajador Eduardo Sigal, quien hizo un repaso sobre la actuación del MERCOSUR desde su creación hasta la actualidad y como fue cambiando, con el transcurso de los gobiernos, la definición de este espacio político; e Inés del Carmen Páez D’Alessandro, Secretaria de Gestión y Articulación Institucional del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, quien destacó la concepción de esta gestión de respetar las individualidades que cada territorio del país presenta a la hora de diseñar las políticas sociales necesarias para los mismos.
Concluidas las participaciones de los oradores, los jóvenes pasaron al trabajo en talleres según los temas a tratar en el encuentro: Integración Regional, Comunicación, Desarrollo Económico y Políticas Sociales. Cada uno de los heterogéneos grupos de militantes realizó anotaciones sobre algunas conclusiones a las que llegaron en las tres horas que llevo el debate. El encuentro contó también con la participación de militantes de las Provincias de Entre Ríos y Santa Fe.
En el cierre Remo Carlotto compartió el panel junto a los oradores por áreas quienes leyeron y comentaron los acuerdos y las autocríticas que veían desde su óptica e intercambio. Antes del cierre el Diputado invitó a tres referentes juveniles dentro del kirchnerismo que desempeñan diferentes funciones: Mariana Grass Directora Nacional de Juventud; Juan Cabandié Legislador de la Ciudad de Buenos Aires y Secretario de Juventud del PJ y José Ottavis congresal del PJ, quienes aportaron su mirada sobre la coyuntura y el rol que la juventud debe cumplir.
Finalizando, Carlotto sostuvo: "vamos replicar este encuentro de compañeros en distintos puntos del país, buscamos esta simbología de la idea de los 500 cuadros para intentar generar un estado de movilización de debate y discusión, debemos generar nuevos referentes y mayor intercambio".
Por último el encargado de dirigir el acto definió el espacio que fue bautizado "100×500 Jóvenes para el Proyecto Nacional" como un lugar para ser apropiado por todos los participantes, para que funcione como catalizador de todos aquellos debates que muchos están buscando tener y elogió a los jóvenes que habían leído las conclusiones cuando dijeron que: "debatir y ser críticos con este proceso es un factor de enriquecimiento y no de retraso, no de diferenciación y de marginación sino de construcción y de aporte".