La vuelta de Rafael Di Zeo no podía pasar inadvertida. En un momento en el que las barras de los clubes del fútbol argentino están en boca de todos por los conflictos internos desatados, Boca no podía ser la excepción. Pese a los buenos resultados que está cosechando el equipo y el aparente clima de distensión, la interna entre el sector que representa al líder histórico de La 12 y su lugarteniente Mauro Martín, podría traer más de un dolor de cabeza a la dirigencia del club. Por estas horas, y tras los incidentes del domingo pasado en instalaciones de la institución, se está analizando la clausura del estadio, y la prohibición de que hinchas del club vayan en condición de visitante el próximo fin de semana en el partido con Vélez Sarsfield.
En contexto con todo esto, en diciembre hay elecciones en Boca. Entre los principales candidatos aparecen Daniel Angelici, Jorge Amor Ameal y José Luis Beraldi. Sin embargo, y rememorando aquella ?edad de oro? del club, las figuras siguen siendo las mismas. Mauricio Macri y Rafael Di Zeo vuelven a aparecer en escena. El primero apoyando la campaña del empresario del juego, mientras que el segundo con su asistencia a la cancha. Pese a que la cordial relación que supieron forjar, el lugar que ocupa el barra en el presente es un gran signo de interrogación.
Mientras algunos alegan que fue un enviado del angelicismo para contrarrestar la postulación del actual presidente, otros desmienten categóricamente el vínculo. Tampoco es amigable la relación entre el líder de la barrabrava con el máximo dirigente. En declaraciones a la prensa, a principio de semana, Di Zeo manifestó que su ingreso y el de su grupo a La Bombonera fue gracias a los dirigentes.
Para evitar las miradas acusadoras ?e inevitables- hacia su persona, Jorge Amor Ameal salió a desmentir la movida. Negó los dichos del barra expresando que ?yo no entrego entradas?.
También indicó que "no es verdad que el club le haya restituido el carnet de socio, ya que faltan cumplir una serie de pasos administrativos?.
A su turno, Di Zeo manifestó: "Yo nunca dije que las entradas me las había dado Ameal?, aunque dejó en claro que ?salieron de Boca, de los ticketes que se separan para las peñas del interior".
Por otra parte, y en un tono conciliador, el barrabrava planteó que para que haya paz, ?nos tenemos que sentar todos a hablar y unir fuerzas". La mejor forma de solucionar las cosas – continuó- es que "todas las partes se sienten a conversar sobre sus diferencias".
"Hay que hablar y unir fuerzas por Boca. Acá nadie tiene que estar peleado", sintetizó.
Consultado sobre las diferencias que lo distanciaron de Mauro Martín, su ex ladero en la hinchada, aseguró: "Yo estuve preso tres años y medio. Hay que preguntarle a él qué hizo para que pase esto. Yo fui preso por Boca".
Y reiteró que está dispuesto a "bajarse" del próximo partido en cancha de Vélez siempre y cuando la barra oficial tampoco reciba entradas para ir a alentar al xeneize.
En el plano judicial, y en relación a los conflictos del último fin de semana, se iniciaron dos investigaciones: una tiene que ver con el daño al molinete en la puerta 6, en la que se taparon previamente las cámaras de filmación; y la otra es por una supuesta infracción al artículo 93 del Código Contravencional por el ingreso sin entradas que se habría producido en el marco de los daños al molinete. El fiscal a cargo de la causa, Walter López, inició una pesquisa por la rotura de al menos un molinete y la anulación de cámaras de seguridad del club en esa zona.
El abogado Juan Manuel Lugones, coordinador del Movimiento "Fútbol en Paz en Argentina" presentó un recurso de amparo a fin de que el Ministerio de Seguridad de la Nación a través de la Unidad de Coordinación de Seguridad y Prevención de la Violencia en Espectáculos Futbolísticos garantice la seguridad de las personas que asisten a espectáculos deportivos de este tipo en la Ciudad.
Asimismo solicitó como medida cautelar urgente se aplique el derecho de admisión a los estadios a aquellos ciudadanos que se encuentran incluidos en el Banco Nacional de Datos sobre Violencia en el Fútbol, creado por el artículo 25 del Decreto Nº 1466/97 y/o en el Registro Nacional de Infractores a la Ley del Deporte, creado por Ley 26.358.
El abogado afirmó que el Estado ?no aplica la ley ni respeta los convenios que el mismo promueve?. Según informó, el 30 de marzo de 2009 se publicó en el Boletín Oficial el Convenio marco de colaboración entre el Ministerio de Seguridad y Derechos Humanos y la Asociación del Fútbol Argentino, destinado a la prevención de la violencia en los espectáculos futbolísticos.
?Lamentablemente esta fue una medida para la tribuna". No se aplica el derecho de admisión y los barras y los generadores de violencia siguen asistiendo a los estadios de fútbol porque el Estado se lo permite?, dijo Lugones.
La causa quedó radicada ante el Juzgado en lo Contencioso Administrativo Federal N° 12 a cargo de Guillermo Enrique Rossi (Expte N° 38365/11).