Guillermo Montenegro, titular del ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, calificó al tránsito porteño como "un problema grave" tanto para los habitantes de la urbe como para quienes diariamente ingresan y egresan a ella, y defendió las medidas anunciadas el pasado jueves en el Palacio de Gobierno local.
"Estamos determinando si con lo que tenemos se mejora el problema. Queremos un tránsito más fluido y más cómodo", aseguró por Radio América.
Sobre la polémica despertada por el regreso de las multas fotográficas, el Ministro informó: "Si la fotomulta está mal sacada no se cobra. El 50 por ciento de la inversión tiene que estar dedicada a las infracciones con luz roja".
También remarcó la importancia del control vehicular realizado por agentes.
"El Banco de la Ciudad financió patrulleros. La idea es elevar de 1.300 a 1.500 personas más el cuerpo de agentes. Esto no sólo tiene que ver con el tránsito en la Ciudad, sino con la vida de las personas", dijo. Y sobre la Policía Metropolitana, agregó: "Ya se habló con las universidades públicas y la Legislatura para lograr el concurso de profesores".
Dispuesto a no dejar las medidas sólo en el plano de los anuncios y las polémicas, el Gobierno porteño lanzó este viernes por la mañana un fuerte operativo en el microcentro focalizado en el control del estacionamiento en lugares prohibidos.
"Queremos empezar a poner como caso testigo el control de estacionamiento más severo", aseguró el director de Seguridad Vial, Pablo Martínez Carignano. Y agregó: "Los vehículos en infracción serán multados y removidos en los casos en los que estén generando perjuicio".