En el contexto de la Comisión de Desarrollo Económico, el titular de la Agencia Gubernamental de Control, Javier Ibáñez, fue citado para dar explicaciones sobre los casos de corrupción dentro del organismo, que condujo, entre otras cosas, a la renuncia de la titular de Fiscalización y Control, Vanesa Bercowski.
Con la presencia de los padres de las dos jóvenes que fallecieron en el boliche Beara, acompañados por familiares de víctimas de siniestros que, participaron de las tres horas que duró el encuentro con carteles y fotos reclamando justicia, la presidenta de la Comisión, Delia Bisutti, dio inicio a la jornada. En una exposición que rozó la media hora, la legisladora de Solidaridad e Igualdad se refirió a la causa de corrupciones.
Tras la reunión con el juez que entiende en la causa, la diputada ratificó sus dichos de que "aunque está el secreto de sumario, hay escuchas telefónicas directas que nos están manifestando que podrían ser extorsiones a comerciantes, delitos electorales y negocios incompatibles a la función pública".
Acto seguido, y tras una breve intervención de uno de los padres de las víctimas, quien manifestó que ?la Agencia no funciona como debiera?, Ibáñez comenzó su discurso dejando en claro en primer lugar -así como lo hizo reiteradas veces- que su gestión ?tiene sólo un año y que mucho de lo ocurrido fue previo a que asumiera en el cargo?.
Sobre la causa en particular, manifestó: ?Desconozco el estado judicial. No tuve información más que la que dieron los medios?. Sin embargo, informó que ?se abrieron los sumarios correspondientes y que tres de las cinco denuncias las radicaron desde la Agencia?. Luego, leyó la copia de la renuncia de Bercowski y aclaró: ""No voy a opinar sobre el tema?.
En relación a este punto, y las responsabilidades que le correspondían a los encargados de habilitar el lugar, el titular de la AGC aseguró: ?No puedo asumir los roles de otros. Un perito fue y verificó el lugar?.
Asimismo, y si bien reconoció la función del Estado en el rol que le toca, el funcionario manifestó que ?hay otros actores sociales que también forman parte del proceso?. Aquí, mencionó a los empresarios y dueños de los boliches y afirmó: ?Quieren burlar al Estado?.
Posteriormente, y en respuesta a la inquietud del padre, calificó de ?dolorosa? la situación y aseguró que desde la Agencia se esfuerzan "para que no vuelva a ocurrir?.
Con referencia a las habilitaciones de los espacios nocturnos, Ibáñez expresó que ?hay una desvirtuación de los rubros?, y que este tipo de acciones "son un fraude para el Estado y la ciudadanía?.
Por último, los legisladores emitieron sus inquietudes, entre ellas, las fallas en el sitio web de la Agencia (en el que se informaba ?mal? cuáles eran los ?lugares seguros? para concurrir), las auditorías internas y externas vinculadas con la entidad y la realización de fiestas privadas. Parte de las preguntas fueron contestadas, y el resto, Ibáñez se comprometió a responderlas por escrito.
LA AGENCIA GUBERNAMENTAL DE CONTROL EN NÚMEROS:
En la actualidad, desempeñan funciones 3.000 personas. El organismo tiene la tarea de realizar inspecciones en tres áreas: obras, comercios y alimentos.
De acuerdo a lo que informó el titular, en 2010 se realizaron 14.000 inspecciones y 1.000 clausuras. Entre los motivos, figuraron irregularidades en los permisos, exceso de alcohol y capacidad.
Respecto a la gestión (2008- actualidad), la efectividad en las inspecciones fue en aumento. De un 74 por ciento en el primer año, en la actualidad es del 90 por ciento, según datos oficiales.
Para hacer más efectivo el trabajo, desde el organismo trabajan con un software, que permite entre otras cosas, captar denuncias de vecinos y requisar de mejor manera los barrios porteños.