El Pacto de Gobernabilidad que habrían acordado Aníbal Ibarra, Mauricio Macri y Patricia Bullrich transita por estos días sus primeros pasos. Habría en el acuerdo algunos puntos básicos, que conformarían una especie de agenda permanente, como la modificación del Código de Convivencia, pero uno de los primeros frutos evidentes de este pacto podría ser el acuerdo que están a punto de firmar el Gobierno porteño y el Ministerio de Justicia y Seguridad de la Nación, que permitiría la creación de la Dirección General de Policía Comunitaria, dependiente de la Superintendencia de Seguridad Metropolitana. Este cuerpo se ocuparía del manejo del tránsito, de la represión de las contravenciones y de la seguridad en los operativos conjuntos entre policías e inspectores de la Ciudad.
El secretario de Justicia y Seguridad Urbana, Juan Carlos López, le aseguró en la tarde de este lunes a un cronista de NOTICIAS URBANAS que "el acuerdo está muy avanzado, tanto que en pocos días podría estar listo para ser firmado. De esta manera se incorporarían a la planta de la Policía Federal 500 agentes más por cuenta de la Ciudad, con lo que se aliviaría en parte el trabajo de las comisarías".
"La mitad de los efectivos será destinada a operativos permanentes de seguridad en las plazas y en las estaciones de trenes. Otra parte irá a las comisarías. Nosotros, de todos modos, pediremos los efectivos que ya están incorporados a la policía porque no podemos formar una dirección de novatos. Luego irán sumándose los efectivos que ingresen para cubrir a los que solicitemos nosotros", prosiguió el flamante secretario.
De todos modos, el acuerdo no le impide a López seguir tras el objetivo de máxima: tener una policía propia, por lo que está convencido de que "es razonable que el jefe de Gobierno, que ya participó en el nombramiento del jefe de Policía Federal anteriormente, al menos debería intervenir en la designación de nuevo director general de la Policía Comunitaria. Nuestra relación con la Policía Federal no es ya la misma que hace unos años atrás, nosotros hemos trabajado en conjunto durante mucho tiempo y además la hemos dotado de bastante equipamiento. Por eso, en este proceso, que debe culminar con una policía local en manos del Gobierno porteño, participa el jefe de la Policía Federal".
En cuanto a la Ley Cafiero, que prohibe expresamente a la Ciudad de Buenos Aires poseer una fuerza de seguridad propia, López contesta de manera terminante que "durante el año 2004 vamos a enviar un proyecto para derogar algunos artículos de esa ley".
La diputada Silvia La Ruffa (Unión para Recrear Buenos Aires), manifestó que para estos temas "debe haber consenso" y que en los últimos años hubo pocos avances en cuanto al traspaso de la Policía Federal a la Ciudad, pero que "desde el 25 de mayo se aceleraron los acuerdos en ese sentido".
La legisladora, de todos modos, si bien expresa que "una mayor presencia de la policía en la calle es un rasgo positivo, si la policía sólo va a manejar el tránsito y las contravenciones, no es una Policía Comunitaria, sino una Policía Municipal".
La Ruffa también anunció que el secretario de Justicia y Seguridad Urbana volverá a convocar al Consejo de Prevención del Delito y la Violencia, que hace más de un año que no se reúne y que ni siquiera está incluido en el presupuesto del 2004 ni en el organigrama del Gobierno de la Ciudad.
El diputado macrista Jorge Enríquez, que es además el presidente de la Comisión de Seguridad de la Legislatura, se manifestó de acuerdo con el planteo del gobierno porteño, aunque negó la posibilidad de que esté incripto en un Pacto de Gobernabilidad. "De ninguna manera -afirmó el legislador-, en realidad existe una coincidencia con nuestra posición, que expresamos en el transcurso de la campaña, que es favorable a un traspaso gradual de la Policía a la égida de la Ciudad".
De todas formas, Enríquez aclaró que "mientras no se reforme la Ley Cafiero, cualquier acuerdo para mejorar la seguridad que se dé en igualdad de condiciones y no subordinando la Ciudad a la Policía Federal, contará con nuestro apoyo. Por eso celebro que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires nos haya escuchado y que empiece a tener una agenda de seguridad".
Finalmente, Enríquez se mostró favorable al trabajo del nuevo secretario de Justicia y Seguridad Urbana, Juan Carlos López. "Lo conozco a López y sé que conoce la calle, porque cuando él era fiscal y yo subsecretario de Gobierno trabajamos juntos en muchos operativos".
