A pesar de que le caminó el territorio y de que -no contenta con ello- concentró a su tropa en la propia Legislatura en la que Aníbal Ibarra es el oficialismo, "Lilita" Carrió no quiso ni hablar de él.
Interrogada por NOTICIAS URBANAS acerca de si su hombre en la Ciudad podría ser el actual jefe de Gobierno porteño, la chaqueña se negó a responder acerca de esa posibilidad. También se negó a precisar si Rafael Bielsa cuenta con chances de enarbolar las banderas rojas y azules del ARI en las próximas elecciones para jefe de Gobierno. "No hay ningún candidato para la Ciudad", respondió tajante.
Después de tantas negativas, la "extranjera" más temida por el resto de las fuerzas políticas se reconoció como "una anárquica", por lo que la organización de la fuerza que conduce se encuentra "muy atrasada".
Entretanto, afirmó que "existe un proceso de cambio del cual no somos los autores. Por eso digo que la cuestión no es llegar al poder, sino cambiar el poder".
Finalmente, ante la posibilidad de futuras alianzas políticas, Carrió aseguró -tocando de tanto en tanto un gran crucifijo con sus manos- que "muchos vamos caminando hacia un mismo lugar, por eso sólo lo que se deba juntar se va a juntar, porque lo que se junta a presión se rompe casi siempre".
