El fuego se extendía en una línea de cuatro cuadras de longitud paralela a la costa. Doce dotaciones de bomberos de la Policía Federal y de la Prefectura luchaban intensamente para dominarlo. Finalmente fueron once las hectáreas que, este jueves, ardieron en la Reserva Ecológica, producto de un nuevo incendio cuyas causas aún se desconocen.
El fuego se originó alrededor de las 16:30 y pudo ser controlado cuatro horas después, tras una dura batalla en la que el viento conspiró contra el trabajo realizado por los efectivos para detener las llamas. A las doce de la noche, aún quedaban focos por apagar. "Por suerte, el fuego no pasó del área de las cortaderas, que son plantas fácilmente reproducibles y no afectó a otras especies más importantes", señalaron fuentes de la Secretaría de Medio Ambiente y Planeamiento Urbano de la Ciudad.
A su vez, Eduardo Epszteyn, titular del área, explicó que el incendio pudo ser detectado rápidamente gracias a "un sistema de telecámaras distribuidas a lo largo de la reserva". "Desde hace un año y medio a casi dos años no teníamos ningún incidente de este tipo", recordó el secretario porteño.
