Los candidatos porteños no podrán utilizar la imagen de niños menores de doce años durante la campaña electoral, en propaganda gráfica ni televisiva, si se transforma en ley el proyecto presentado por el diputado Alejandro Rabinovich (ARI), que modifica la Ley 268 de Financiamiento de campañas políticas.
Si la ley hubiera estado aprobada desde hace tiempo, no hubiese sido posible, por ejemplo, la publicidad de Domingo Cavallo en la que les contaba a los chicos en un parque las bondades de su plan de Gobierno para la Ciudad o el lanzamiento de Mauricio Macri junto a Melina, en un basural de Villa Lugano.
“Recientemente —dijo Rabinovich— se ha cuestionado la utilización de la imagen de una niña con fines electorales. En lo personal, creo que resulta prudente incluir dentro de la problemática de la niñez la cuestión de su explotación con miras a mejorar la performance electoral de un candidato”.
La iniciativa del vicepresidente tercero de la Legislatura se basa en la Convención de los Derechos del Niño, en lo que a la protección de la intimidad y privacidad del niño respecta y promueve como pena para los candidatos que infrinjan la prohibición, la pérdida de los fondos públicos previstos para la realización de la campaña.
“Por otro lado —agregó el legislador—, en el ámbito local se encuentra vigente la Ley 114 sobre Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, cuyos artículos 15 y 16 consagran el Derecho a la Integridad y a la Reserva de Identidad. Por lo tanto, sería coherente que se penase a todo político en campaña que aproveche la imagen de un niño para alimentar su propio marketing electoral”.