Momentos de tensión se vivieron en la trunca reunión conjunta de las comisiones de Educación y Legislación General y del Trabajo que intentaría despachar los diferentes proyectos vinculados a la modificación del Estatuto Docente en lo respectivo a las Juntas de Clasificación. Gritos opositores y a favor entorpecían el trabajo legislativo, que arrancó con una "viveza criolla" de la oposición.
A las 10 en punto de la mañana, la diputada Laura García Tuñón, presidenta de la Comisión de Legislación General y del Trabajo, se presentó sola al Salón Montevideo que pronto se colmaría de asesores y docentes gritando. Pasada media hora, y sin la presencia de ningún diputado (los PRO esperaban mirando por TV y los demás opositores marchaban con los gremios docentes), la diputada de Proyecto Sur dio por finalizada la reunión conjunta. Falta de quórum fue la explicación.
La respuesta del macrismo fue inmediata ya que, al enterarse por circuito cerrado de lo resuelto por Tuñón, bajó rápidamente al salón Montevideo (Sergio Abrevaya y Juan Pablo Arenaza de la Coalición Cívica también se hicieron presentes). En paralelo, los legisladores de la oposición María José Lubertino, Francisco Nenna, María América González y María Elena Naddeo, se mantenían fuera del salón acompañando la protesta docente.
Ya instalada dentro del salón, la presidenta de la Comisión de Educación, Victoria Morales Gorleri, acompañada de sus compañeros de banca (Enzo Pagani, Alejandro García, Karina Spalla, Carolina Stanley), resistió los embates del colérico público opositor que clamaba en contra del proyecto de eliminación de las Juntas de Clasificación Docente, reclamando que se avanzara en el debate con el objetivo de lograr la firma del despacho oficialista y los otros dos en minoría que existen. "Es una reunión de trabajo continuo por lo cual el quórum no se puede levantar porque técnicamente estábamos en cuarto intermedio y así seguiremos hasta ponernos de acuerdo", explicó Gorleri en medio del griterío. (El encuentro de esta mañana forma parte de una reunión que empezó el día que se estableció el cronograma y se cerrará con la firma de los despachos).
Entre gritos e insultos el bloque PRO resistió sentado en la mesa, a la espera de la llegada de los otros legisladores partícipes de las dos comisiones, para poder continuar el debate. La llegada de la legisladora macrista Diana Martínez Barrios logró que ocho personas estuvieran dispuestas a firmar despacho, sin embargo, Enzo Pagani explicó que lo que se pretende "es dar el debate sin firmar nada per se".
Karina Spalla, vicepresidenta de la comisión de Legislación General y de Trabajo, se comprometió a hablar con Tuñón en busca de un acuerdo y volver en una hora. Morales Gorleri, aceptó la propuesta y llamó a un nuevo cuarto intermedio por una hora.