El subsecretario de Regulación y Fiscalización de la Ciudad de Buenos Aires, Marcelo Antuña, aseguró que es la empresa Metrovías SA la que debe garantizar la prestación normal del servicio de subterráneos y que ésta debería estar cumpliendo con el cronograma para que no hubiera alteraciones en la frecuencia de los mismos.
Por su parte el vocero de la empresa Metrovías, Juan Bautista Ordóñez, reconoció que durante esta jornada volverá a haber inconvenientes en el servicio. "Estamos haciendo todos los esfuerzos a nuestro alcance para que el servicio sufra lo menos posible: hay gente que trabaja 12, 14 y hasta 16 horas por día para evitar problemas", expresó el portavoz.
El conflicto en el subterráneo se originó con la decisión del gremio que agrupa a los trabajadores, la Unión Tranviarios Automotor (UTA), que decidió cumplir con una resolución del Gobierno de la Ciudad, que dispuso que los trabajadores de la empresa, por ser su tarea insalubre, deben cumplir jornadas de seis horas.
Antuña explicó que "la empresa en estos momentos no está aceptando la reducción horaria, en función de una apelación que ha presentado a la declaración de insalubridad. Pero es importante aclarar que hemos recibido en el día de ayer dos notificaciones, a raíz de dos amparos efectuados por personal de subterráneos por los cuales dos jueces ordenan a la empresa que dé cumplimiento a la resolución, y le ordena al Gobierno porteño que verifique si efectivamente se está cumpliendo con esta medida".
Indicó Ordóñez que la empresa está "preocupadísima" por las demoras en el servicio y que está enviando telegramas a los trabajadores "intimándolos a que no abandonen las tareas", pero aclaró que como "apostamos a la paz social, no tomamos medidas disciplinarias".
Entretanto, el cuerpo de delegados del personal realizó una conferencia de prensa para ratificar que no son responsables de las irregularidades en el servicio de subterráneos y que sólo están "acatando una disposición tomada por el Ministerio de Trabajo y refrendada por el Gobierno de la Ciudad".
Antuña, por su parte, aseguró que "en función de estos dos oficios que recibimos de la Justicia hemos hecho una serie de inspecciones. Se verificaron las cinco cabeceras de las terminales, los cinco talleres y efectivamente se ha corroborado que no se está cumpliendo con el cronograma normal de los servicios. Por lo tanto, en el caso del ámbito laboral sería pasible de una sanción de verificarse esta circunstancia más allá de la sanción que pueda aplicar la Comisión Nacional de Regulación del Transporte por la falta de cumplimiento de las condiciones del pliego".
"Lamentablemente no creo que haya una salida rápida. Esto tendrá que ver en todo caso con la decisión de la empresa de resolver y solucionar este problema, independientemente de las instancias judiciales que obviamente tendrá para adelante. Me parece que tiene que resolver esto en forma inmediata", concluyó Antuña.