¿Por qué decidió asociase con Rodolfo Terragno (UCR) y no con Mauricio Macri (Pro)?
–A alguno le puede sorprender, sobre todo porque nunca hablé de si estaba manteniendo conversaciones o no, pero siempre hay un montón de trascendidos, y en los trascendidos de corto plazo siempre se olvidan de las relaciones de largo plazo. Con Rodolfo nos conocemos desde hace 20 años, fui asesor de él y hemos tenido un montón de visiones similares a lo largo del tiempo.
–¿Pero hubo conversaciones con Michetti?
–Tengo una amistad enorme con Gabriela y gran afinidad porque creo que en todos los espacios políticos hay matices. Ella me parece una de las dirigentes políticas con mejores cualidades personales, tiene una calidad ética y humana que es difícil encontrar. La verdad es que las conversaciones que tuve iban exclusivamente orientadas a mi relación con ella. La única posibilidad de que prosperara un acuerdo es que hubiera dos cosas: la posibilidad de discutir matices, porque yo soy más de centroizquierda y hay gente en el Pro que es más de centroderecha, y que esos matices se pudieran discutir de cara a la gente; y ninguna de esas cosas estuvo presente.
–¿Cómo se define usted ideológicamente?
–Me considero un socialdemócrata moderno y dije que iba a participar en aquel espacio que tuviera la firme vocación de hacer primarias.
Lousteau toma aire y con su habitual sencillez dedica su tiempo ante NU para explicar la importancia de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 11 de agosto.
“Es como que en lugar de que el director técnico de un equipo le diga a la gente qué jugadores van a salir a la cancha, le ponga todos los jugadores a su disposición y le diga ‘armá tu seleccionado, que después vamos a dejar la vida por vos, en las elecciones y en la gestión’. El segundo punto importante es que abre las tranqueras de los partidos, y así invitamos a la gente a participar y a que diga qué es lo que piensa; podemos tener un montón de coincidencias, pero dentro de esas coincidencias va a haber matices y le estamos diciendo a la gente que elija los matices, eso es superador como método. La tercera ventaja es el método, que nos obliga a que dialoguemos y que, además de dialogar, nos pongamos de acuerdo en un sistema y que respetemos ese sistema.”
Lousteau fue centro de noticias no solo por sus intervenciones políticas –el 11 de marzo de 2008, siendo ministro de Economía, anunció la implementación de la resolución 125, que fijaba las retenciones móviles, lo que desataría el conflicto entre el Gobierno y los sectores rurales–, sino también porque fue tapa de revistas de la farándula por su fugaz relación con Juanita Viale y luego por su casamiento con Carla Peterson.
El joven economista, porteño e hincha de Independiente, también incursionó en el rubro editorial. Publicó Economía 3D, que se convirtió en best seller y lo motivó a lanzar luego Otra vuelta a la economía.
En el plano electoral, Lousteau competirá en las PASO con otras dos listas que se presentarán en Unen –la alianza de la UCR, Coalición Cívica, Proyecto Sur, Libres del Sur, Partido Socialista, Partido Socialista Auténtico y Podés–. Una estará encabezada por Lilita Carrió y la otra postula a Ricardo Gil Lavedra, Humberto Tumini y María Eugenia Estenssoro.
–Si pasadas las Primarias le tocara encabezar la lista de diputados, ¿cree que podrá cosechar los votos que en las PASO eligieron a alguna de las otras opciones?
–Eso es lo que son las PASO. Después el voto es soberano. Nosotros lo que hacemos es abrirnos y ponernos a consideración de la gente para que elija la combinación de candidatos que más le guste. La verdad es que los jugadores que están me parecen de una jerarquía muy alta.
–¿Pero cree que quienes voten primero a Gil Lavedra o a Carrió luego en octubre lo votarán a usted?
–Sí, ¿por qué no?