Las palabras del jefe de Gobierno, Mauricio Macri, sobre la necesidad de que el Gobierno dialogue con los dirigentes del campo repercutieron en los kirchneristas porteños, quienes salieron a cruzarlo. El titular de la bancada K en la Legislatura, Diego Kravetz, le respondió a las palabras del ingeniero, quien en conferencia de prensa aseguró que "dar un paso atrás no es un signo de debilidad", entre otras cosas.
"Más que dar consejos al resto, debería ocuparse de los horrores de su gestión, ya que tienen los mayores números de subejecuciones desde los últimos 10 años, y logró lo que ni siquiera pudo la crisis del 2001: escuelas sin gas, hospitales sin remedios ni gasas, la Ciudad llena de baches y el promedio de dos renuncias por mes desde su asunción", afirmó.
Para el diputado porteño, "lo de Macri excede el oportunismo: es el hazmerreir de la política". "Su torpeza y su pobre administración en la Ciudad hace que ni siquiera la Sociedad Rural quiera quedar pegado a él", aseguró.
"Antes de ofrecerse como mediador o proponer soluciones, Macri debería agarrar los libros y ponerse a estudiar. Que entienda de una buena vez que el Gobierno nacional sabe lo que está haciendo", sentenció, y remató: "Antes de asumir como jefe de Gobierno decía que tenía los mejores planes y los mejores equipos, pero resulta que al final no tenía ni para jugar en primera D; no me quiero imaginar si le dejamos la discusión con los ruralistas en sus manos".