Pacho es, sin duda, el más mediático de los O?Donnell. Divulgador de historia argentina, médico psiquiatra y psicoanalista, adquirió fama de neorrevisionista intentando retratar a los héroes criollos sin pasarlos por photoshop aspirando a mejorar sus partes oscuras o menos mostrables. Lo hizo a través de la serie La historia argentina que no nos contaron, y muchas de esas producciones lograron encaramarse como best sellers. En los últimos años publicó Juana Azurduy, la teniente coronela; Monteagudo, la pasión revolucionaria y, finalmente, puso en la luz ?en su luz, claro? al polémico,
Juan Manuel de Rosas, el ?maldito? de la historia oficial, tal como él lo llama. Pero, sin duda, lo que más flashes le prodigó fue haberse ocupado del Che Guevara, ese producto tan argentino y tan porteño. ?El Che es tan porteño como su nombre, un maravilloso producto nacional que inspiró a muchas generaciones, a pesar de que nosotros seguimos autodenigrándonos y autodescalificándonos; siempre lo de afuera es mejor y, bueno, seguimos haciendo lo que (Arturo) Jauretche describía como un mecanismo de la dependencia?. Su libro Che, la vida por un mundo mejor también fue base de un documental, y hace pocos meses se lanzó con una publicación sobre los caudillos federales.
Actualmente, dirige el Departamento de Historia de la UCES. En los noventa, fue radical y después peronista, aunque, según su propia versión, su conversión al menemismo en la década maldita no debe ser entendida bajo el contexto actual;
es decir, como un ?salto? de un partido a otro. Fue secretario de Cultura en la Ciudad y, más tarde, en la Nación, además de senador nacional y embajador en Panamá y Bolivia.
?¿Cómo evalúa este llamado de la Presidenta al diálogo? ¿Podrá avanzar, a pesar de la desconfianza?
?Sin duda el diálogo es un elemento central de la democracia, pero no ha sido una práctica habitual del matrimonio gobernante. En lo personal, me gustaría en esta etapa ver a Cristina tomando el timón del Gobierno. No hemos visto todavía lo que es un gobierno de Cristina Kirchner, y quizá ésta sea una buena oportunidad.
?Le gustaría una Presidenta más independiente, digamos.
?Sí, claro?
?De todas maneras, la Capital nunca fue muy pro-Cristina. Ya en las elecciones presidenciales los porteños insinuaban lo que iba a ser el voto 2009.
?Es sabido que la Capital nunca se llevó bien con el peronismo, al punto de que cuando Perón ganó con el 60 por ciento de los votos en los setenta, su candidato, Sánchez
Sorondo, perdió frente a Fernando de la Rúa. Mientras que la fórmula presidencial del Frejuli arrasó en primera vuelta, hubo que recurrir a una segunda para dirimir la plaza de senador. Sánchez Sorondo se presentaba como segundo candidato por la Capital,
en pleno auge peronista. Creo que esta mala relación obedece a varios factores. Uno de ellos es que la Capital está muy cerca del poder y eso hace que los porteños estén en condiciones de ver más claramente la suciedad en el cuello del poder? Por otra parte, el peronismo paradójicamente nunca se llevó bien con el poder.
?¿Le parece que no? No pareciera que en la Argentina haya proyecto de poder sin el peronismo?
?Me refiero a los factores de poder, que residen en la Capital.
?Pero es la clase media la que rechaza al peronismo, no los factores de poder.
?Pero la clase media siempre se ha mimetizado con la alta. Y toma sus valores.
?¿Y por eso vota a Macri?
?No, a Macri lo vota por una demanda de eficiencia. Me parece un disparate el análisis que ubica el voto de Macri como una derechización de los porteños. Eso no es cierto. La verdad es que los candidatos de centroizquierda han sido muy reclamativos y los porteños esperan de Macri mayor compromiso con la gestión. Lo votan con la esperanza de que sea más eficiente, no más de derecha.
?Entonces, el kirchnerismo no fue eficiente, según usted?
?No, no fue percibido como eficiente.
?Y eso que su eslogan de campaña fue ?Nosotros hacemos?. Digo, en Kirchner también hubo un intento de apelación casi apolítica de que los K hacen y la oposición es charlatana.
?Bueno, por algo necesitó hacer ese eslogan de campaña… Tal vez la gente no tendría claro que Kirchner ?hace?.
?Hablando del ?gen? porteño. Dicen por ahí que los porteños aman al Che Guevara en lo discursivo, pero si el mozo tarda en traerles el café piden
que lo echen?
?No entiendo?
?Que hay un doble mensaje entre lo discursivo y lo que realmente pasa.
?Ah, no. Eso me parece un análisis vulgar?
?Le agradezco la sinceridad. De todos modos, no es mi análisis, le aclaro por las dudas.
?Sí, es vulgar, porque un deporte nacional muy autodestructivo es autodenigrarnos. Como decía Jauretche, pensar que todo lo de afuera es mejor es volver a creer
que lo nuestro es barbarie frente a la civilización, que es lo de afuera. Es decir, es un mecanismo que acentúa la dependencia. Y nosotros tenemos muchos y muy buenos productos nacionales, como el Che, sólo que noscuesta valorarlos.
?¿Y qué me cuenta, Pacho, de la resurrección de la UCR después de la muerte de Alfonsín? ¿Cree que Cobos será un presidenciable?
?No, no lo creo. Me parece, además, que es muy oportunista de su parte no haber renunciado. Realmente, es un argentinismo que un vicepresidente haga campaña contra su propio partido. No hay antecedentes en el mundo de algo semejante. Y eso, creo, tendrá un costo. No creo que aglutine mucho a la UCR; ni tampoco que, pasada esta aparente resurrección, tras la muerte de Alfonsín, la UCR se rearme.
?Veo que no se arrepiente de haberse ido de la UCR en su momento.
?No, para nada. Cuando me fui, hicimos una cruzada ética con Hernán Lombardi y sigo
sosteniendo que (El Coti) Nosiglia destruyó el radicalismo como referente moral y ético de la Argentina. Nosiglia tenía la idea de que el PJ, que se nutría con los fondos del sindicalismo, siempre pondría palos en la rueda con sus recursos económicos a cualquier otra fuerza política que estuviera en el poder. Y por eso creó la Coordinadora y replicó esos métodos de financiamiento. De ese modo, la gente dejó de percibir a la UCR como el baluarte ético de la política argentina frente al peronismo.
?Pero no entiendo, porque usted después se pasó al peronismo que, según dice, no era percibido como ético en comparación con lo que históricamente había sido el radicalismo antes de Nosiglia y la Coordinadora.
?No, yo dije que esa era la teoría de Nosiglia, no la mía? Lo que yo creo es que del peronismo siempre se puede esperar lo mejor y lo peor, y me inclino más por lo mejor. Es más, me aventuraría a decir que el próximo presidente será peronista. Incluso Macri sabe bien que sin el peronismo es imposible que un proyecto de poder sea viable en la Argentina.
(NOTA ORIGINALMENTE PUBLICADA EN EL SEMANARIO NOTICIAS URBANAS Nº 198, DEL 23/07/09).