La danza de los nombres no quiere esperar al ballottage del 31 de julio y ya es el tema del invierno en los pasillos legislativos. A falta de trabajo en Comisión, buenos son rumores de oficina y algunos ya comienzan a verse como verdades posibles.
El principal rumor instalado estos días es el cambio de mando en la vicepresidencia primera de la Legislatura a partir de diciembre de este año. Según se arriesgan a decir voceros del Ejecutivo estaría todo dado para que María Eugenia Vidal cumpla el rol legislativo de la vicejefatura de Gobierno y, en ese caso, compartir el comando de las sesiones y del accionar legislativo con Cristian Ritondo, actual jefe de bloque, y a partir de diciembre vicepresidente primero.
Según las mismas fuentes, la designación de Ritondo en ese lugar respondería a un pedido de la propia Vidal ante Mauricio Macri.
Con esos movimientos, la discusión se abre sobre la jefatura del bloque. El PRO -más bien, Mauricio Macri- deberá decidir entre la experiencia comprobada de Oscar Moscariello o la apuesta al joven referente de Marcos Peña en la Legislatura, Fernando de Andreis, quien también cuenta con la venia de Ritondo.
La razón principal para la propuesta de De Andreis, que muchos discutirán (y con fuerza en el seno del macrismo), es la pérdida de injerencia de Marcos Peña en el Poder Ejecutivo. Horacio Rodríguez Larreta no sólo desplazó las principales estructuras michettistas sino que en su trabajo de hormiga también intenta disminuir al hoy afirmado secretario de Gobierno.
Sabido es que el Jefe de Gabinete es uno de los principales impulsores de los cambios en el esquema ministerial que se avecinan, y que darán más protagónicos a los peronistas y a aquellos que trabajan en el armado nacional. Muestra de ello son los dos nombres que suenan para comandar el futuro Ministerio de Gobierno: Emilio Monzó, como ministro, y el peromacrista Álvaro González como vice y encargado de enlazar las dinámicas administrativas del Poder Legislativo con el Poder Ejecutivo.