Una nota que publicó diario ?Libre? este lunes dejó al descubierto que en un departamento del juez de la Corte Suprema de Justicia Eugenio Zaffaroni funciona un prostíbulo.
Según la publicación, en el inmueble del magistrado ubicado en Vicente López 2217 en el barrio de Recoleta, trabajaban más de cinco jóvenes paraguayas que ofrecían sexo a cambio de dinero.
Esta noticia, motivó a que el mismo Zaffaroni saliera a explicar la situación. Confirmó que es dueño de dicho departamento pero dijo que no conoce ni firma los contratos de los inquilinos.
?Realmente no tengo explicación para esto. Francamente, lo único que sucede, según me informan mi apoderado y la inmobiliaria que me maneja esas cuestiones, es que hay un contrato de locación", aseguró el magistrado.
En la misma línea, expresó: "Yo no firmo los contratos ni conozco a mis inquilinos; no puedo ocuparme de la administración de esto, de modo que, puede ser, aunque a mí no me consta, puede suceder. Si está sucediendo, agradezco el escándalo porque de esa manera me ahorrará un desalojo".
En contacto con Víctor Hugo Morales en radio Continental, Zaffaroni reflexionó sobre la situación y dijo: ?Si después de cuarenta años de profesor de Criminología y treinta y cinco años de juez penal, se me ocurre poner un prostíbulo con mi nombre y apellido, soy un débil mental".