Rafael Levy, el dueño oculto del boliche República Cromañón que irá a juicio oral el próximo año por las 194 muertes, mantiene abierto en la misma manzana de la tragedia un prostíbulo. Una denuncia penal que se presentará este jueves por la mañana demuestra mediante cámara oculta que el café-bar de avenida Rivadavia 3007 sigue operando como casa de tolerancia, prohíbida por la ley de Profilaxis y dos convenios internaciones que penalizan la explotación sexual.
Además de la denuncia penal que patrocina Mario Ganora, vicepresidente de la Fundación Alameda, se realizarán un escrache a partir de las 12.30 en este prostíbulo ubicado a metros de la Plaza Miserere.
La Fundación Alameda realizó la cámara oculta y firma la denuncia su titular Gustavo Vera y José Iglesias de la asociación civil ?Que No Se Repita? y Silvia Bignami de la ong ?Paso por la Memoria?.
El prostíbulo camuflado con la habilitación de Café-bar fue denunciando en diciembre de 2008 por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad, a cargo de Alicia Pierini, a raíz de una cámara oculta. Al tiempo esa causa penal fue archivada por el juzgado de María Romilda Servini de Cubria que debía investigar los delitos de trata de personas, comercialización de estupefacientes y la reducción a la servidumbre de las mujeres en el local de Rivadavia 3007, que en un primer momento se lo conocía con el nombre ?Pekos? y luego ?Quatro Cat?s? donde fuera filmada una mujer inmigrante coartada en su libertad por una mafia proxeneta.
El prostíbulo tras un año aproximadamente de clausura judicial para volver a reabrir lo que hizo fue reconvertir su habilitación de wiskería a café-bar. De esa manera con la aprobación del Gobierno de la Ciudad y la inacción de la Policía Federal como la justicia logró retomar el ilegal negocio de la explotación de mujeres penado no solo por la Ley de Profilaxis además por dos convenios internacionales subscritos por este país y con rango supranacional.
Rafael Levy irá a juicio oral por 194 muertes y más de mil lesionados en la noche del 30 de diciembre de 2004 además de las coimas que recibía la seccional 7ª para evitar la represión de los delitos en el boliche incendiado.
Este empresario fue ubicado por este cronista el año pasado en la sinagoga de la calle Libertad casi avenida Córdoba. En su momento se negó a una entrevista y foto. Para lograrlo huyó y a los minutos envió un patotero a golpear y amenazar. La denuncia penal por amenazas y agresiones fue radicada en la comisaría Nº 3 quien elevó la causa a una fiscalía quien jamás llamó a declarar ni siquiera ratificar la denuncia.
Otro de los empresarios ocultos de Cromañón es Raúl Vengrover, socio de Levy, quien fue sobreseído en la causa de la masacre aunque sigue siendo propietario de media manzana donde se encuentra el prostíbulo y el Hotel Star (Ecuador 12) que es su domicilio legal donde denuncian que funciona para hacer los llamados ?pases? de los clientes/prostituyentes con las mujeres víctimas en el prostíbulo.