En el marco del vigésimo aniversario de la promulgación de la Ley 26.061 de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes se llevó a cabo en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, un encuentro de reflexión y construcción colectiva para repensar el camino recorrido y los desafíos pendientes en materia de infancia y adolescencia en la Argentina.
En esta jornada, organizada por la diputada Aldana Crucitta (UCR/Evolución) en conjunto con la Academia Internacional de Psicología Integrativa (AIPI), se reconoció el carácter histórico y transformador de la Ley 26.061, sancionada en 2005, que marcó un punto de inflexión en el paso del paradigma tutelar al paradigma de protección integral de derechos de las infancias.
La diputada Aldana Crucitta en sus palabras de bienvenida resaltó la importancia de la Ley 26.061 al reconocer a ésta como un aporte fundamental en la historia por el cambio de paradigma que significó pero sin perder de vista las deudas pendientes. Además, aprovechó su alocución para hacer un llamado a los presentes: “quiero convocar a todos a renovar el pacto social con las infancias porque cuidar es un acto político y ético, porque una sociedad que cuida a sus niñas y niños es una sociedad que se cuida a sí misma.”
La jornada tuvo como objetivo seguir avanzando por el camino del interés superior del niño como sujeto de derechos y revisar críticamente las deudas pendientes del sistema de protección en sus distintas dimensiones: jurídica, institucional, sanitaria y social.
Bajo esta mirada se presentó, durante el primer panel de exposiciones de profesionales, el enfoque sensible al trauma como clave contemporánea para la implementación real del paradigma de derechos. Toda vulneración deja marcas psíquicas; por eso, el Estado debe garantizar también el derecho a la recuperación emocional.
Kay Ghersevich, Directora Académica y Co-founder de AIPI y primera oradora, haciendo foco en el interés superior del niño destacó que “nuestro compromiso para construir una sociedad más empática bien tratante es la formación de redes sensibles al trauma porque garantizar derechos también es acompañar la reparación emocional de quienes han sido heridos.”
El primer panel continuó con la exposición de la Lic. Sandra Baita (Argentina), psicóloga clínica graduada en la Universidad de Buenos Aires, con posgrado en Clínica de Niños y especialización en Trauma Psicológico e Intervención en Catástrofes y la Lic. Paula Moreno (Argentina), psicóloga clínica especializada en trauma del desarrollo y protección de derechos.
El segundo panel, dedicado a las miradas judiciales y comunitarias sobre la justicia sensible al trauma y las prácticas de cuidado, contó con la disertación de Luz Stella Rodríguez Mesa (Colombia), psicóloga jurídica y forense, Máster en Criminología Aplicada y en Dirección de Operaciones y Calidad y a continuación Esteban Gómez Muzzio (Chile) psicólogo, Magíster y Doctor en Psicología.
Por otro lado, este evento tuvo el apoyo del Consejo de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires y contó con la presencia de su Presidenta, Karina Leguizamón. También estuvo presente Baltazar Ojea, como representante del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, otra de las instituciones patrocinadoras de la jornada, la Presidenta del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Victoria Morales Gorleri, autoridades y funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, funcionarias y funcionarios del Poder Judicial, especialistas en niñez y adolescencia y representantes de organizaciones de la sociedad civil.


