El bloque legislativo de La Libertad Avanza (LLA) busca postergar el debate del proyecto de ley de Presupuesto 2026, con la intención de que la discusión se traslade a sesiones extraordinarias cuando ya esté incorporada la nueva composición de la Cámara de Diputados.
La estrategia del oficialismo apunta a que, tras asumir los nuevos legisladores a partir del 10 de diciembre, la nueva correlación de fuerzas permita asegurar la aprobación de la norma con mayor comodidad.
En ese marco, los gobernadores provinciales aparecen como actores clave en las negociaciones: desde el entorno del Ejecutivo nacional aseguran que serán un eslabón central en el acuerdo para posponer el tratamiento del Presupuesto.
La idea es alinear a las bancadas provinciales con el oficialismo para consolidar un bloque que respalde tanto la postergación de la discusión como los contenidos del proyecto presupuestario.
Por su parte, la oposición —en especial el peronismo— mantiene voluntad de sostener el calendario vigente y rechaza la postergación. No obstante, admiten que existen sectores dispuestos a negociar una nueva citación del dictamen para que el debate sea con la Cámara renovada.
🔴 La Libertad Avanza busca postergar el debate del Presupuesto 2026 y tratarlo en sesiones extraordinarias.
👉 El peronismo quiere mantener la fecha del dictamen pero reconoce que hay bloques dialoguistas que están dispuestos a acordar una nueva citación para que se trate con… pic.twitter.com/elRGJOYiGE
— Radio Rivadavia (@Rivadavia630) October 29, 2025
El Ejecutivo proyecta que, una vez asuma la nueva composición con 107 diputados de La Libertad Avanza (LLA), Pro y UCR, más aliados radicales, necesitará sólo unos pocos votos adicionales para avalar el presupuesto.
El proyecto de Presupuesto plantea un gasto total de aproximadamente 148 billones de pesos y un superávit primario proyectado de 2 billones, en línea con las exigencias reveladas por fuentes parlamentarias.
Además, está previsto que el Ejecutivo incluya en las sesiones extraordinarias no solo este proyecto sino también reformas laboral y tributaria que generan fuerte resistencia gremial.
Este será uno de los primeros test de fuerza del nuevo bloque dominante y determinará en buena medida la gobernabilidad del mandato que arranca.




