El presidente del partido Unite, José Bonacci, rompió el silencio este miércoles y aseguró que “Espert me llamó en 2021 preocupado y me pidió ayuda para justificar donaciones recibidas en negro”, en alusión a los fondos vinculados al empresario Fred Machado. Según Bonacci, aquel pedido se refería al uso de un avión que Machado habría puesto a disposición en la campaña de 2019.
El dirigente político manifestó su sorpresa ante la existencia de una nota que vinculaba al candidato con un aporte de US$ 200.000: “me sorprendió cuando salió la nota del domingo … que pudiera existir un aporte de 200.000 dólares tan absurdamente documentado”, afirmó Bonacci. Y agregó que los apoderados de la campaña le propusieron hacer una cena para “blanquear US$ 400.000”, pero que él rechazó la idea: “yo dije: ‘No, mirá, yo esto no lo hago’”.
Frente a esas acusaciones, Espert había dicho que “quien maneja los recursos de los candidatos no es el candidato sino el sello”, y que la ayuda de Machado en 2019 correspondería al partido, no a él directamente. En el mismo sentido, comentó que el vínculo con el empresario era previo a su postulación, y se deslindó de responsabilidades: “Un candidato no maneja fondos de campaña”.
En tanto, Espert volvió a declinar confirmar si recibió esos US$ 200.000 y calificó el tema como una “causa refritada” de 2021, anticipando que llevará la pelea a los tribunales. “A Grabois le voy a contestar … lo voy a seguir hasta abajo de la cama”, espetó el candidato, al hacer alusión a la denuncia presentada por Juan Grabois.
El caso tiene una dimensión particular porque Fred Machado está detenido por orden de la justicia de Estados Unidos por presunto lavado de dinero, y actualmente cumple prisión domiciliaria en Viedma. La polémica abrió nuevos cuestionamientos sobre la transparencia en el financiamiento de campañas y la responsabilidad de los candidatos frente a los aportes cuestionados.