El presidente Javier Milei participó este domingo desde Buenos Aires y por video del “Europa Viva 25″, un evento político organizado en Madrid por el grupo de parlamentarios europeos de ultraderecha Patriots, al que el mandatario argentino había planeado asistir hasta que el revés electoral en la provincia de Buenos Aires cambió sus planes.
“Quiero que sepan que mi corazón está con ustedes y que hoy, circunstancialmente, físicamente, me ha tocado estar en mi país defendiendo con uñas y dientes los logros de esta gestión, pero sin lugar a dudas, cuando sea posible, nos volveremos a ver”, dijo el presidente argentino en un breve intercambio con Gonzalo Abascal, líder del partido ultraconservador Vox, y anfitrión del evento.
Milei habló también del crimen del activista de derecha Charlie Kirk, asesinado el miércoles pasado en Utah, Estados Unidos. El mandatario se comparó con la víctima del crimen al recordar los inicios de ambos en la militancia derechista “en soledad o con pequeños grupos de personas”.
“Tanto a Kirk como a cualquiera de nosotros, los izquierdistas y los progres nos tildan de ultras o extremos, cuando en realidad somos así porque no queremos delincuentes adueñándose de nuestras calles, no queremos una invasión migratoria, no queremos que quemen y destruyan nuestras ciudades y tampoco vamos a aceptar que nos disparen por decirles lo que pensamos”, dijo.
El discurso de Milei
Milei fue presentado en el Palacio de Vista Alegre como el líder “que hace llorar a cualquier zurdo”. Fue una decepción su ausencia en una jornada que estuvo casi enteramente dedicada a Kirk. El presidente se disculpó por su ausencia y agradeció especialmente a Abascal, quien “siempre me recibió aun cuando todos me daban la espalda”.
El mandatario dedicó su alocución al “queridísimo” Kirk, a quien consideró un “mártir” y calificó el crimen como “una prueba gráfica más de lo que es verdaderamente la izquierda en su estado puro: odio y resentimiento”.
Dijo que Kirk fue un “guerrero ejemplar en el campo de la batalla de las ideas” y reflexionó sobre que, “paradójicamente”, el atentado “fue perpetrado y celebrado por los mismos que nos acusan de violentos a nosotros, que lo único que hacemos es expresar con vehemencia la veracidad de nuestros argumentos”.
Milei opinó que Kirk era una persona “intachablemente pacífica” y auguró que “por cada uno de nosotros que bajen, aparecerán nuevos divulgadores para sucedernos”. El presidente contó que conoció a al militante asesinado, lo consideró un “ser humano excepcional” e hizo un breve resumen de su biografía.
Reiteró su acusación contra “la izquierda” como responsable del crimen de Kirk: “Ellos son en todo momento y lugar un fenómeno violento y lleno de odio. Pero no debemos temerles, porque como dicen las sagradas escrituras, ellos nos atacan llenos de insolencia y de impiedad para exterminarnos a nosotros, a nuestras mujeres y a nuestros hijos y para apoderarse de nuestros despojos”.
Sin embargo, Milei vaticinó que “el cielo los aplastará delante de nosotros” y pidió no tenerles “miedo” ya que “si nos atacan es porque estamos haciendo lo correcto y estamos cerca de lograr vencerlos en los planos políticos, sociales, culturales y económicos”.
El presidente argentino cerró su discurso invitando a los asistentes al evento a “no bajar los brazos” y auguró que con Abascal y Vox “podrán poner de pie a España como lo estamos haciendo nosotros en Argentina”.