Con el respaldo de la región, el canciller Gerardo Werthein logró un avance diplomático significativo al asegurar el apoyo a Malvinas ante el Comité de Descolonización de la ONU, donde anualmente el estado argentino reitera su solicitud al Reino Unido para negociar sobre la soberanía del archipiélago en el Atlántico Sur.
Este hecho se dio en un contexto delicado, marcado por el conflicto en Medio Oriente y las repercusiones diplomáticas del alineamiento del gobierno libertario con Estados Unidos e Israel. “La Cuestión Malvinas va más allá de los gobiernos. Es una política de Estado, una causa nacional, un compromiso que ha perdurado a través de todas las generaciones de argentinos”, afirmó Werthein.
Gracias a la labor diplomática en foros internacionales, especialmente en la ONU, el “Comité de los 24” volvió a votar a favor de Argentina en su reclamo, en función de la condena no solo al colonialismo, sino también al unilateralismo, es decir, el uso de la fuerza para ocupar territorios, como sucedió en 1833 en Puerto Argentino. La resolución fue adoptada con un amplio consenso, y Argentina recibió el respaldo de naciones como Venezuela, Cuba e Irán, a pesar de las diferencias ideológicas entre los gobiernos.
En Naciones Unidas, el Canciller Werthein pidió reanudar las negociaciones con el Reino Unido por la Cuestión Malvinas.
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— Cancillería Argentina 🇦🇷 (@Cancilleria_Ar) June 18, 2025
Ante las 29 delegaciones reunidas en Nueva York, el ministro reafirmó el momento en que el archipiélago fue ocupado por la fuerza, desplazando a las autoridades argentinas y a la población local. “Fue, sin lugar a dudas, un acto colonial, en contra del derecho internacional y una violación de la soberanía territorial argentina. Nunca hemos aceptado la situación impuesta”, afirmó el canciller durante su presentación.
Más allá de su deber como representante del gobierno argentino en el exterior, en el ámbito diplomático se destacó el firme discurso del canciller en el C-24, centrado en la “violación del derecho internacional” por parte del Reino Unido. Mencionó no solo la normativa que condena a la nación europea, sino también la explotación ilegal de los recursos de la plataforma continental argentina.
Mientras tanto, se consideró como una señal de apoyo al multilateralismo, una forma de política exterior característica de las naciones emergentes —en la que Argentina se destaca— pero que fue desplazada por el presidente libertario alineado con la ideología de Donald Trump, al menos desde el ámbito del discurso.
La pregunta que incomodó al Canciller
En ese contexto, Milei y Netanyahu firmaron “el Memorándum de Entendimiento con Israel por la Democracia y la Libertad”, sin dar mayor detalle del contenido de la alianza sellada días antes del ataque de Tel Aviv a Irán y en medio de la presión por la situación humanitaria en la Franja de Gaza.
Este tema, en tanto, no fue ajeno en los pasillos donde se llevó a cabo la reunión del C-24. El canciller argentino, que no suele hablar con la prensa y busca evitar a toda costa filtraciones de cualquier tipo, fue sorprendido por una periodista argentina. Si bien en un principio intentó desligarse, finalmente accedió a hablar sobre la votación por Malvinas. “Estamos muy contentos y celebramos que haya sido adoptada por consenso, es algo bueno para todo nosotros”, dijo Werthein.
Sin embargo, el ministro se mostró incómodo ante la consulta de quien le preguntó sobre el contenido del pacto con Israel anunciado el pasado 12 de junio. “¿Qué ganará el pueblo argentino con ese convenio?”, le consultó la periodista Silvina Sterin Pensel, corresponsal de C5N y NTN24. Visiblemente incómodo, Werthein respondió: “No voy a hablar de eso”.
El pacto con Israel, suscripto el pasado 12 de junio, apunta a la “construcción de un orden internacional basado en la libertad, la justicia y la dignidad humana”, según el comunicado oficial. En ese momento, una de las voces que más lo celebraron fue el controversial ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, principal impulsor de los asentamientos de colonos en territorios ocupados condenados por la ONU. El aliado de la coalición de Netanyahu destacó “el potencial del nuevo enlace aéreo como motor para impulsar alianzas comerciales y oportunidades económicas de beneficio mutuo”.