La CGT optó por no asistir a la reunión de este martes con el Consejo Nacional del PJ, mientras que otorgó a los sindicatos “libertad de acción” para que determinen su participación y posibles paros parciales si se lleva a cabo una marcha en apoyo a Cristina Kirchner el miércoles.
En un comunicado de prensa, difundido después de las 16, la CGT señaló que, “con motivo de la notificación de la sentencia a la Compañera Cristina Fernández de Kirchner, se ha dispuesto la realización de una concentración popular que manifieste el repudio a una decisión injusta, parcial y arbitraria” y, tras destacar que “los trabajadores estaremos al lado de nuestra compañera injustamente condenada”, anunció que “convoca por convicción, pertenencia y solidaridad a todos los gremios y trabajadores/as que quieran sumarse a la concentración para dar testimonio de acompañamiento”.
“Aquellos sindicatos que hayan dispuesto acciones sindicales para manifestarse -destacó la central obrera- quedan liberados para realizar todas las medidas que estimen conducentes en función de cada una de las actividades que representen”, indicaron.
El texto de la CGT finaliza de esta forma: “Los trabajadores y trabajadoras tenemos memoria y vamos a manifestarnos en las calles para repudiar la injusticia y la proscripción en defensa de la democracia”.
Al encuentro en FATSA fueron los cotitulares cegetistas Héctor Daer (Sanidad) y Octavio Argüello (Camioneros), además de Hugo Moyano (Camioneros), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Julio Piumato (judiciales), Juan Pablo Brey (aeronavegantes), Jorge Sola (seguro), Omar Plaini (canillitas), Miguel Paniagua (espectáculos públicos) y dos dirigentes que forman parte del Consejo Nacional del PJ: Víctor Santa María (encargados de edificios) y Guillermo Moser (Luz y Fuerza).
No concurrieron, en cambio, importantes sindicalistas como Carlos Acuña (estaciones de servicio), otro miembro del triunvirato de la CGT; Andrés Rodríguez (UPCN) y Gerardo Martínez (UOCRA), ambos aún en Europa por la conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), y Sergio Romero (UDA).
Las autoridades del PJ habían convocado a los líderes de la CGT para planificar la caravana que respaldará a la expresidenta, quien ha sido condenada a 6 años de prisión y a la inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos debido a la Causa Vialidad.
No obstante, a los dirigentes cegetistas les desagradó que el PJ los citara el jueves anterior y luego pospusiera la reunión para este martes, con el propósito de que algunos gobernadores peronistas pudieran unirse.
También hay malestar en la cúpula de la CGT por la presión de algunos de sus miembros identificados con el kirchnerismo por la fuerte presión para que declarara un paro general por la caravana en favor de CFK.
Uno de los que quedó en la mira de sus colegas es Abel Furlán, líder de la UOM y secretario del Interior de la CGT, que afirmó que la central obrera debía “construir un objetivo común con consistencia en el tiempo”, en alusión a un paro general tras la condena a la ex presidenta. Sin embargo, el líder metalúrgico no convocó a un paro de su gremio y sólo llamó a movilizarse.
La negativa de la CGT a convocar un paro general provocó descontento y malestar entre los sectores más radicales del kirchnerismo, que buscan crear una imagen contundente de un país detenido y en protesta si la ex presidenta debe comparecer ante la Justicia.