En el Gobierno están seguros de que, de cara a las elecciones legislativas de septiembre en la provincia de Buenos Aires, se establecerá una alianza con Pro, a pesar de que la relación con el exmandatario Mauricio Macri esté prácticamente fracturada. En los entornos de ambos partidos confirmaron esto, aunque este lunes fue el propio presidente Javier Milei quien dirigió sus críticas hacia el exjefe de Estado por el fracaso del proyecto de ficha limpia en el Senado.
“El entendimiento se dio entre Rovira y Cristina, pero la maniobra fue de Macri, quien se adhiere al acuerdo y promueve la idea de que fue Milei”, afirmaron en la Casa Rosada.
Las palabras de Milei surgieron tras las declaraciones de Macri el sábado, cuando, al ser preguntado sobre el panorama en Buenos Aires y un posible pacto con La Libertad Avanza (LLA), condicionó el apretón de manos. “En este momento, estamos centrados en la elección de la Ciudad, esperaremos hasta el 18 y buscaremos sentarnos a dialogar en un tono de respeto… Los ataques hacia Pro y hacia Silvia [Lospennato] son inaceptables“, expresó Macri. Esta fue una forma de intervenir después de los enfrentamientos entre Silvia Lospennato, candidata a legisladora por Pro, y Milei en relación a la caída del proyecto de ficha limpia.
Macri consideró que el mandatario “está destruyendo el valor de la palabra presidencial” por sus dichos posteriores a la sesión, en la que arremetió contra Pro.
El desenlace de estas negociaciones y las decisiones esperadas se anticipan, desde hace semanas, para después del domingo 18 de mayo, cuando se realicen las elecciones en la ciudad. “La caída de Pro es inminente. Macri deberá aceptar que es el cierre de un ciclo. Hoy, Macri es el (Eduardo) Duhalde de 2005”, afirmaron desde el oficialismo.
Desde el Gobierno reafirmaron que el cambio en la relación con Macri se produjo tras la contratación del asesor catalán Antoni Gutiérrez-Rubí por parte del gobierno porteño. “Gutiérrez ha trabajado para todos: Cristina, Alberto, Massa, siempre utilizando el mismo método de desprestigio. Es alguien que ha envenenado la política argentina y ahora está haciendo precisamente lo mismo”, señalaron allegados al Presidente. “Gutiérrez Rubí ha cruzado una línea, lo hicieron y les gustó. Es el creador de las campañas sucias”, añadieron.
En el ámbito libertario mencionaron un “desgaste” del expresidente Macri, que se volvió aún más evidente en la última semana “en varias apariciones públicas”. Señalaron, entre ellas, una entrevista en la que Macri mencionó haber tomado unas gotas que le proporcionó su esposa, Juliana Awada, y donde, frente a Lospennato, declaró que Leandro Santoro ganaría, lo que generó una aclaración de la candidata sobre su confianza en lograr una buena elección.
Dentro de las filas libertarias aseguraron que no les preocupa el efecto que la confrontación con Macri pueda tener en el ámbito legislativo, donde Pro es el apoyo para muchas de las iniciativas que impulsa el oficialismo en el Congreso, o para frenar los avances de la oposición, como en el caso de la interpelación sobre $Libra, el acuerdo con el FMI y los vetos que afectarían las metas fiscales.