"Se votó por unanimidad el año pasado. Incluso yo lo voté afirmativamente", se atajó el vicepresidente primero de la Legislatura porteña, Santiago de Estrada (Juntos por Buenos Aires), este miércoles durante la reunión de la Comisión de Labor Parlamentaria.
Es que en la próxima sesión se votará sobre tablas un proyecto por el cual se modifica la resolución que crea el Reglamento de Servicios y Circulación de materiales de la Biblioteca "Esteban Echeverria" (que funciona en la Legislatura) a raíz de un error legislativo.
La norma a modificar establece que en caso de sustracción o deterioro intencional de algún material impreso o contenido en cualquier tipo de soporte o mobiliario de las salas, el personal de Biblioteca dará aviso inmediato a la Dirección General de Cultura, quien dará traslado a la Dirección General de Seguridad de la Legislatura para que proceda a la detención y denuncia del infractor ante autoridad competente, de conformidad con lo prescripto en los artículos 162 y 184 del Código Penal de la Nación.
De Estrada sostuvo que "la Dirección General de Seguridad no puede detener a nadie, por lo que el artículo deberá decir que procederá a hacer la denuncia ante la autoridad competente en caso de corresponder".
El legislador macrista explicó a los demás diputados que este error legislativo se descubrió cuando lo llamaron de la Dirección General de Seguridad para consultarle si debían detener a una persona que no había devuelto un libro a la Biblioteca. Esta anécdota causó la risa generalizada en la reunión. Incluso, la diputada Gabriela Michetti se tentó y no podía pronunciar palabra.