Durante la sesión de este jueves, la Legislatura porteña aprobó cuatro dimisiones de legisladores porteños. Renunciaron a sus bancas María Laura Leguizamón, Alicia Pierini (PJ), Atilio Alimena (Partido Demócrata) y Claudia Serio (Unión Cívica Radical).
Leguizamón dejó el cargo para emigrar al Congreso nacional como senadora por la Capital y fue remplazada en su banca porteña por Gerardo Monasterio, quien juró este mismo jueves frente al Cuerpo y entre sus manifestaciones, aseguró que fue "el primero que izó la bandera argentina en las Islas Georgias".
Aunque varios diputados despidieron a Leguizamón con palabras elogiosas, los legisladores socialistas Roy Cortina y Fernando Finvarb y el radical Daniel Bravo aprovecharon para criticar la decisión del Senado y de la Corte Suprema de Justicia de otorgarle la banca a la ex belicista en vez de a Susana Rinaldi e insinuaron que el Cuerpo no debería aceptarle la renuncia.
Por su parte, los otros diputados renunciantes -Pierini, Alimena y Serio- se despidieron de sus cargos tras haber sido designados defensora del Pueblo y defensores adjuntos, respectivamente. Los tres funcionarios electos aprovecharon la ocasión para agradecer a quienes trabajaron con ellos durante estos años y a todos lo que sostuvieron sus candidaturas para integrar este órgano de control.
Los remplazantes de los legisladores renunciantes son Diego Estévez (ingresa por PAÍS), Martín Borrelli (Encuentro por la Ciudad) y Roberto Arellano (Alianza). Algunos, posiblemente, asuman su cargo aunque sea por un par de días, ya que el 10 de diciembre se renueva totalmente la Legislatura. En cambio Borrelli, que fue electo diputado por la Alianza de Centro en los últimos comicios porteños y podría perder la posibilidad de presentarse para una futura reelección, anunció a este medio que no asumirá en este período, sino que jurará con la nueva camada legislativa, el próximo miércoles 3 de diciembre.
