Por segundo año consecutivo, el músico Gustavo Santaolalla se quedó con el Oscar a la Mejor Banda de Sonido, esta vez por la película "Babel", escrita y dirigida por el mexicano Alejandro González Iñárritu.
Las palabras del compositor, al recibir la cucarda, hicieron gala de una profesion de fe cosmopolita, porque -dijo- aunque la música del film exhibe una "identidad propia", también "va más allá de países religiones".
SAntaolalla le dedicó el premio a su padre, a la Argentina y "a todos los latinos". El año pasado, el músico consiguió la estatuilla de la Academia de Hollywood por la banda de sonido de "Secreto en la montaña", una historia de cowboys homosexuales, impensable en la era de Howard Hawks.
Es que todo evoluciona. El argentino se impuso a las composiciones de los músicos Thomas Newman (por "El buen alemán"), Philip Glass (por "Escándalo"), Javier Navarrete (por "El laberinto del Fauno") y Alexandre Desplat (por "La Reina").