La llamada al 911 por la que amenazaron a la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal con “reventar” la Casa de Gobierno de La Plata salió desde un pabellón de la cárcel de esa misma ciudad.
“El llamado se hizo este domingo, alrededor de las 20, del teléfono que funciona en el pabellón de buena conducta de la Unidad Penitenciaria 9″, declaró un funcionario. La voz masculina que profirió la advertencia contra la gobernadora se limitó a vociferar que “mañana le vamos a reventar el gobierno a Vidal”. Hoy es martes y hasta ahora (las 10:00 de la mañana) no hubo que lamentar víctimas en el marco de esta afirmación.
La fiscal encargada del caso, Leyla Aguilar, había afirmado antes que se iniciaron actuaciones de oficio y que ya ordenó “distintas pericias y diligencias para ubicar al responsable del llamado telefónico”. Hasta aquí, el éxito coronó la investigación, como se puede ver, aunque falta que se identifique a la persona que usó el teléfono para intimidar a las autoridades.
Sólo algunos agentes de policía se sumaron a los controles habituales que se realizan en las entradas de los edificios públicos, aunque la actividad se desarrolla como siempre.
Aún así, la fiscal informó que “se dio inicio a una exhaustiva y minuciosa inspección ocular en la totalidad del establecimiento, oficinas, baños, pasillos, jardines externos e internos, residencia, como así también en el perímetro” del edificio de la Gobernación en la capital provincial.
Este operativo, por ahora dio “resultado negativo en cuanto al hallazgo de materiales o sustancias que pudieran conformar un artefacto explosivo”, informaron los voceros gubernamentales.
Lo curioso es que el lunes por la noche se repitió la intimidación, también por vía telefónica. En las últimas horas del lunes se repitió la amenaza, en la ocasión fue el hallazgo de una bala de pistola sin disparar que se encontró en el garage de la casa que habitaba Vidal con su exmarido, Ramiro Tagliaferro, en Castelar.
Antes ya había habido otras irrisorias amenazas contra funcionarios bonaerenseses, que consistieron en el hallazgo de dos policías en el despacho de Vidal por parte de una empleada de limpieza, que los denunció, un hecho que fue seguido por una misteriosa irrupción en la residencia del ministro de Gobierno, Federico Salvai, al que le desordenaron la ropa y, finalmente, se debió lamentar un ataque con balines de aire comprimido contra unos vidrios del Ministerio de Salud, que quedaron totalmente astillados.
El presidente Mauricio Macri escribió en la mañana de este martes, un mensaje de consuelo y apoyo para María Eugenia Vidal, que publicó en la red social del pájaro azul. “Acompañamos a @mariuvidal en su tarea de sacar adelante la provincia de Buenos Aires. No nos van a parar”, fue el lacónico recado que emitió el presidente de la Nación.