Los exdiputados el Pro Emilio Monzó y Nicolás Massot se presentarán esta semana en el juzgado federal de Lomas de Zamora para conocer las pruebas del espionaje ilegal en su contra. La idea de ambos es ser querellantes en la causa.
También están citados el gremialista Hugo Moyano y el periodista de La Nación Hugo Alconada Mon. Se trata de las citaciones que activó el juez Federico Villena en el marco de la investigación que analiza si desde el Estado, en la gestión de Mauricio Macri, se hicieron tareas de espionaje sobre distintas figuras públicas, encabezadas por Cristina Kirhcner y referentes del Pro.
Justamente, el lunes ya se presentó como querellante la vicepresidenta, quien se constituyó como querellante y después de ver las pruebas difundió un video en donde aseguró que el Gobierno de Macri fue una “verdadera asociación ilícita”, justamente la misma figura penal por las que ella fue procesada.
El miércoles, sin avisarle a nadie y antes del día que tenía previsto, el que también se presentó fue el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta. Su entorno intentó “bajarle el precio” a lo que había visto en el juzgado. Sin embargo, se presentó como querellante.
Lo interesante, dicen en el mundo de la política, es la implicancia que podría tener que sectores del Gobierno de Cambiemos espiaran a hombres propios: también está citada como víctima María Eugenia Vidal, quien ya había alertado al entonces presidente que la estaban espiando en 2018. La ex gobernadora bonaerense también tiene previsto presentarse en el juzgado. Otros de los espiados fueron el diputado Cristian Ritondo, exministro de Seguridad de Vidal; Diego Santilli, vicejefe de Gobierno porteño, y el legislador Waldo Wolff.
Los que sí tomaron la decisión de ir la semana próxima son Massot y Monzó. En su entorno dicen que irían juntos, porque entienden que las razones de la vigilancia sobre ellos está ligada una misma razón: haber sido críticos al ala más dura del Pro. Esas diferencias quedaron expuestas en distintas declaraciones públicas.
