El ocaso de Pino

El ocaso de Pino

El cineasta, que en 2013 le arrebató la senaduría al kirchnerismo, en 2015 dilapidó el poco capital político que retenía. Sueña con la presidencia pero mientras pierde sus aliados cercanos.


Desde que Fernando Solanas decidió irrumpir en la política partidaria argentina alternó buenos y malos resultados electorales, como consecuencia de sus decisiones. Y si bien nunca consiguió escalar fuerte en el plano nacional, pudo lograr en el plano porteño una diputación, la actual senaduría y posicionarse en la pelea por la Jefatura. Sin embargo este 2015 muestra a un Pino más cercano a convertirse en leña que en madera para una fuerte construcción.

Es que el cineasta lanzó ya en 2014 su precandidatura presidencial -como en 2010, aunque luego terminó desistiendo de la competencia- sin tener una base política o construcción social en la cual asentar dicha aspiración. Desde antes pero acentuados desde ese momento, los errores se sucedieron uno tras otro.

El pacto político y posterior divorcio con Elisa Carrió trajo a Pino la posibilidad, primero de llegar al Senado, pero luego de quedarse en la absoluta soledad. Es que sin Carrió las posibilidades de Solanas de llegar al parlamento eran casi nulas. Sin embargo, su alianza trajo que los sectores más izquierdistas de su amado Proyecto Sur dieran un paso al costado.

Repasemos. En mayo de 2013 cuando las charlas entre el cineasta y la chaqueña eran un hecho, Claudio Lozano pegó el portazo en el FAP y acusó a sus actores –entre ellos Pino- de “cachivaches”. Días más tarde, Alejandro Bodart y con él el MST, también salieron de Proyecto Sur marcando una falta de coherencia.

Sumemos a los que pegaron un portazo de Proyecto Sur por la “falta de contención” de Pino y sus giros políticos: Claudia Neira (se fue al kirchnerismo), Rafael Gentili, Jorge Selser, Pablo Bergel (conformó un monobloque) y 12 de los 15 juntistas comunales que ostentaba en su momento. Hasta un alejamiento de “color”, Pino perdió el “pinomóvil”.

Con tantas bajas, pero apoyado en el hombro de la mediática Carrió, Pino se animó a pensar en su candidatura presidencial para 2015. Pero luego se distanció de Carrió, y en soledad, aún busca la batalla.

En el cierre de alianzas y listas Solanas volvió a aislarse. Mientras que el PSA –partido que siempre lo acompañó- prefirió integrar ECO, Proyecto Sur fue para el lado de Surgen. Y allí, otra vez Pino dio la espalda a los suyos. Mientras que el partido cerró una lista conjunta con Libres del Sur, cuya nómina a la Legislatura encabeza el hijo de Alcira Argumedo, Juan Pablo Olsson, Solanas emitió un comunicado donde afirma no apoyar ninguna lista, bajo la excusa de “no haber logrado una fórmula de unidad”.

Claro que la última palabra no está dicha, pero de no apresurarse y trabajar nuevos acuerdos políticos, Pino quedará hablando en soledad.

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