De cara al 14 de noviembre, el grueso de los analistas buscaba desentrañar cuántos votos de Ricardo López Murphy de las PASO podían mudarse al campamento de Javier Milei en la elección general. Sin embargo, en Juntos por el Cambio piden prestar atención a la circulación de la mano contraria y advierten que María Eugenia Vidal podría quedarse el 14 de noviembre con parte del apoyo que el economista libertario consiguió el 12 de septiembre. Lo dicen, encuesta en mano, y apelando a un clásico de la grieta: el voto útil anti K.
El último sondeo que llegó al equipo de campaña de Vidal es de Aresco, la consultora que fundó Julio Aurelio y hoy conduce su hijo Federico, uno de los encuestadores que mide para el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta. El estudio al que accedió Clarín incluye un relevamiento de 1.200 casos que, se apuran en aclarar en la Ciudad, “se hizo entre el 6 y el 14 de octubre, antes del debate”.
La aclaración está relacionada con que en Juntos por el Cambio creen que el encuentro en los estudios de TN, con un alto rating (6,6 puntos) y repercusiones en los días siguientes, jugará a favor de su candidata.
Fuentes del Gobierno porteño indicaron a Clarín: “Tenemos una expectativa muy positiva sobre lo que dejó el debate y eso no está medido en esta última encuesta. Sí hicimos algunos estudios cualitativos, y a María Eugenia le dio muy bien. Creemos que reafirmó su jerarquía como líder, su carácter propositivo, frente a una cosa más confusa y barrosa del resto. El que va ganando es el que más pone en juego y nos parece que ella no perdió”.
Algunas encuestas mostraban a Milei muy cerca del candidato kirchnerista, Leandro Santoro, cuando en las primarias había sacado cerca de la mitad de los votos: 25,05% el Frente de Todos contra 13,88% de La Libertad Avanza.
Juntos por el Cambio, en tanto, había quedado arriba con 48,79%; pero se trataba de la suma de las tres listas internas y la duda era cuánto de ese voto se quedaría dentro del espacio en la nueva ronda electoral.
Uno de esos estudios advertía que parte del crecimiento del economista libertario se debía a votos de López Murphy que se estaban fugando hacia allí.
▶Los datos de Aresco
La firma que conduce Federico Aurelio muestra un cuadro connálisis con dos tablas de intención de voto. Una con blancos e indecisos, y otra proyectando esos números y teniendo en cuenta sobre el voto afirmativo.
– La primera, con 1,3% de blancos y 5,2% de indecisos, muestra a Vidal con 43,9%, Santoro 24,2%, Milei 16,2%, Myriam Bregman (Frente de Izquierda) 6,5% y Luis Zamora (Autodeterminación y Libertad) 2,7%.
– La segunda, Vidal crece a 47%, Santoro a 25,9%, Milei a 17,3%, Bregman a 7% y Zamora a 2,9%.
Es decir, más allá de que el economista libertario queda claramente tercero, es el único que crece respecto a las PASO.
Pero además, en Juntos por el Cambio miran con atención otros datos del estudio de Aresco. Uno analiza la migración del voto entre la PASO y la elección general. Y allí, si bien como muestran otros estudios, un 15% del apoyo a López Murphy se iría a Milei, también aparece un 14% de votantes de Milei en las PASO que se iría a Vidal.
Parece un trabalenguas estadístico, pero no lo es. Puesto en números y teniendo en cuenta lo que sumaron los tres: por un lado, Milei estaría captando para la general unos 30.000 votos de López Murphy y 23.000 de Vidal, pero por el otro estaría perdiendo 36.000 suyos que irían a la exgobernadora.
Allí apuntan a otro cuadro del estudio que evaluó la fidelidad/dureza del voto, donde el apoyo a Milei allí aparece un poco más volátil que a Vidal. En el macrismo creen que estos últimos son electores que pueden terminar de su lado, con la lógica de la grieta.
Clarín explica que con los números de las PASO y las encuestas sobre la mesa, hay 12 bancas que parecieran tener destino seguro: 7 para Juntos por el Cambio, 3 para el Frente de Todos y 2 para La Libertad Avanza. La que queda la disputan el Frente de Izquierda, el espacio de Milei y, si creciera bastante por encima de los 50 puntos, la lista que encabeza Vidal.