Durante las últimas semanas, Caputo ha comenzado a distanciarse de algunas de las negociaciones más importantes, como el debate del presupuesto 2026. En lugar de llevar la voz de Las Fuerzas del Cielo, ha comenzado a recomendar a los gobernadores que hablen directamente con Santilli. Este cambio de estrategia ha llevado a algunos a interpretarlo como un reconocimiento de su posición en un contexto político nuevo y menos protagónico.
A pesar de su aparente bajo perfil, los allegados a Caputo insisten en que su relación con el presidente Javier Milei se mantiene sólida. Sin embargo, la influencia de Karina Milei en la gestión del gabinete es innegable, ya que ha colocado a Manuel Adorni como jefe de Gabinete y a Santilli en el Ministerio del Interior. Esto ha suscitado diversas reacciones en el entorno de Caputo, quien trata de navegar entre los nuevos cambios.
Se observa una dinámica interna donde la estrategia de bajar el perfil podría ser una táctica deliberada. Caputo se prepara para el futuro mientras evalúa las oportunidades que se presentarán después del 10 de diciembre, cuando se forme una nueva composición del Congreso. Miembros de Las Fuerzas del Cielo creen que una vez que se superen los desafíos inmediatos, tendrán la posibilidad de recuperar protagonismo.
“Sigamos trabajando con fuerza para lograr las reformas que la Argentina necesita”. —Karina Milei, Presidente de La Libertad Avanza
📍Congreso Legislativo de LLA, Mar del Plata pic.twitter.com/bToWuQ61oB
— La Libertad Avanza (@LLibertadAvanza) December 1, 2025
Refiriéndose a la situación actual, un miembro de su grupo comentó: “Es un momento de perfil bajo, sin una agenda candente por la que luchar. En este momento, lo fundamental es que se aprueben leyes como el presupuesto y otras reformas”. Esta percepción sugiere un enfoque pragmático, centrado en la estabilidad gubernamental.
Caputo también ha tomado medidas para suavizar las tensiones con los Menem, quienes han vuelto a ganar protagonismo en el gobierno. Aunque muchos de sus partidarios no apoyan esta reconciliación, Caputo ha hecho esfuerzos por mostrar gestos públicos de distensión. La reciente presencia de “celestiales” en actos políticos indica un deseo de cohesión y la necesidad de mantener la unidad en la fuerza.
A medida que la presión política aumenta, Caputo enfrenta un periodo de transición. Con varios de sus colaboradores en posiciones cambiantes, la incertidumbre sobre la continuidad de figuras clave en su equipo se cierne en el horizonte. Aunque los desafíos son considerables, la estrategia de Caputo parece ser una espera activa, manteniendo su posición en áreas clave del gobierno mientras observa el nuevo equilibrio de poder en palacio.




