Los cortes de luz masivos ocurridos en los últimos días en la Ciudad provocaron un fuerte impacto en el sector comercial pyme, desde donde denuncian pérdidas millonarias como consecuencia de la falta de suministro, la imposibilidad de atender al público o la mercadería que debió descartarse por mal estado.
Un relevamiento que llevó a cabo la Federación de Comercio e Industria (FECOBA), en sus 65 centros comerciales porteños arrojó que para más del 60 por ciento de los dueños de los locales el daño fue “grave o muy grave”.
Según el sondeo, el 35,3 por ciento describió el evento como grave, el 26,1 como muy grave y el 18,5 por ciento, moderado. Además, el 86,5% anticipó que la situación podría llegar a ser aún peor en caso de continuar los apagones en la misma o mayor frecuencia mientras que el 43,7 está convencido de que la situación se verá todavía más complicada para lo que queda del verano.
Al momento de ser contactados, aún quedaban más de 8.500 comercios sin servicio de electricidad. “Esta encuesta nos permitió medir el impacto del fuerte apagón que dejó a oscuras a más de 700 mil usuarios y detectar sus consecuencias: por los pedidos que recibimos y las respuestas a este relevamiento sabemos que el impacto económico fue inmediato, con pérdidas que estamos evaluando pero se anticipan millonarias, y un escenario común: miles de comerciantes que aún el miércoles por la tarde seguían esperando una respuesta de las empresas proveedoras”, alertó Fabián Castillo, presidente de FECOBA.
Ante esta situación, FECOBA elevó reclamos inmediatos ante Edenor, Edesur y el Enre. Según agregó Castillo, en el sector comercial pyme los cortes causaron que muchos negocios no pudieran abrir o mantenerse abiertos y complicaciones en situaciones esenciales, como el mantenimiento de productos perecederos, problemas para bajar las persianas por falta de luz y cortes en el agua corriente. Una situación agravada por las altas temperaturas y el temor a la inseguridad en algunos barrios.