La reciente designación de las autoridades en el Senado de la provincia de Buenos Aires ha desatado una nueva lucha de poder entre las facciones del kirchnerismo lideradas por Cristina Kirchner (CFK) y Axel Kicillof. Durante la sesión preparatoria para la jura de senadores, las negociaciones que normalmente preceden a este tipo de eventos se desmoronaron rápidamente, evidenciando una vez más la fragilidad de las alianzas dentro del peronismo.
El choque se centró en la repartición de las vicepresidencias del Senado, instancias clave que deben regularse entre el oficialismo y la oposición. Las vicepresidencias primera y tercera son actualmente ocupadas por figuras cercanas a CFK, lo que intensifica las tensiones en la búsqueda de un equilibrio de poder que parece cada vez más distante entre ambos sectores.
Representantes de Kicillof han manifestado su descontento al considerar que el sector de CFK pretende monopolizar los cargos sin una verdadera negociación. Un legislador del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), bajo el liderazgo de Kicillof, expresó: “Vinieron a la sesión con un pliego de condiciones y querían llevarnos puestos. Así es imposible llegar a un acuerdo”.
[POLÍTICA] Nueva interna en el peronismo por la designación de las autoridades del Senado bonaerense: desde el círculo cercano a Cristina exigen las vicepresidencias que tiene la Cámara alta, que deben dividirse entre el oficialismo y la oposición, y Kicillof se niega. https://t.co/djgZvjJfu9 pic.twitter.com/FHZxakjcnH
— ElCanciller.com (@elcancillercom) December 9, 2025
Una de las principales controversias gira en torno a quién ocupará la vicepresidencia primera, un cargo estratégico en la línea sucesoria de la vicegobernadora Verónica Magario. Los seguidores de CFK están presionando para que este cargo sea ocupado por un representante de su sector, potenciando así su influencia en el recinto legislativo.
Este nuevo capítulo en el Senado bonaerense resuena como un recordatorio de las luchas internas que caracterizan al peronismo, donde la ambición por el control de espacios de poder puede eclipsar la posibilidad de colaboración. A medida que el año se cierra, la incertidumbre persiste en un contexto donde los acuerdos son cada vez más necesarios, pero cada vez más difíciles de alcanzar.




