Lo paradójico fue que el viernes pasado cuando los cuerpos de los bolivianos todavía estaban en la morgue, Telerman debió dedicar una buena porción de tiempo a una reunión con representantes de Abuelas, HIJOS, Familiares en uno de los salones del palacio municipal, pedida con urgencia ante la preocupación de estas organizaciones por la no continuidad de Alegre. Los representantes, entre quienes no se contaba Estela de Carlotto, pero recibían todo su aliento desde Europa, fueron enfáticos a la hora de manifestar su simpatía por Alegre y su fuerte antipatía por cualquier figura que no surja del consenso con los organismos. Sin que lo digan claramente, Telerman sabe que su problema con ellos es si nombra a alguien del CELS, a quien justamente pensaba designar. El cruce no fue bueno. Telerman les hizo notar que el apriete (así pensó él) al que era sometido estaba fuera de lugar al decirles que la continuidad en la polìtica de derechos humanos del gobierno porteño estaba asegurada por él mismo. Por debajo de los modales diplomáticos, Telerman trató de decirles que la Subsecretaría de Derechos Humanos no estaba siendo licitada y que ese viernes no se abrían los sobres.
No fue lo que entendió Lilita Boitano, quien le reprochó que en una reunión que tuvieron ella, Carlotto y Tati Almeida, horas después de su asunción, el Intendente les había asegurado que Alegre continuaría en el cargo.
Paula Maroni, de HIJOS, sostuvo ante NOTICIAS URBANAS que Telerman le contestó el reproche a Boitano con evasivas pero que luego se comprometió a que en una futura reunión, que se iba a dar entre ayer y hoy pero que no ocurrió hasta el momento, les presentaría una terna para que los organismos presentes en esa reunión puedan dar su parecer sobre los nombres propuestos.
El cargo depende, en la tira ministerial, de la ministra de Derechos Humanos y Sociales Gabriela Cerruti quien, para el viernes (y por eso el alerta de estos organismos), ya tenía definido no sólo la remoción de Alegre, (tenía su renuncia presentada como lo hicieron todos los funcionarios que habían sido designados por Aníbal Ibarra) sino el perfil de el o la remplazante. En cualquiera de los casos, sería alguien joven y con tanta conciencia del pasado, como del presente de trabajo esclavo, así como visión de futuro. Valores que también reconoce en Alegre pero a quien Cerruti no conoce en profundidad y con quien no compartió demasiadas actividades como sí lo hizo con gente del CELS, fuente de la que provenía el remplazo para Alegre. Y aún proviene.
La presión ("preocupación" dicen ellos) de estos organismos sobre Telerman, provoca un severo malestar a su conducción política. Al no tener un partido político, ni haber ganado solo las elecciones, al encontrarse en una situación impensada, no ideal, pero en la que quiere sobrevivir y perdurar, el Intendente debió ceder de buena y mala gana cargos ministeriales a quienes pueden asegurarle gobernabilidad, y apenas pudo mantener para sí mismo, para la gente de su riñón, la secretaría Legal y Técnica, la secretaría de prensa y difusión y el ministerio que preside Cerruti. Si cede a la presión/preocupación, Telerman muestra debilidad y si no cede se gana la antipatía manifiesta de personalidades públicas como Carlotto quien ya está enojada por la designación de Cerruti con quien tuvo una diferencia en la Comisión Provincial de la Memoria de La Plata.
Pero llega el día D de Decreto. Mañana a más tardar, se terminan de definir las nuevas estructuras gubernamentales tras la ley de ministerios y se completarán los cargos vacantes. También este.
Maroni de HIJOS, dijo que ellos no mencionaron al CELS en la reunión con Telerman, como fuente de su disgusto, pero dejó en evidencia que si la persona designada proviene del CELS, un organismo reconocido nacional e internacionalmente, a ellos no los conforma.
–¿Qué pasa si Telerman designa a alguien del CELS?
–Veremos. (Dijo Maroni)
