Pese a que estaba previsto su tratamiento en la última sesión de la Legislatura, será este lunes por la tarde cuando se resuelva finalmente el proceso de juicio político a cinco miembros del Consejo de la Magistratura. La Sala Acusadora de la Legislatura porteña considerará las nulidades planteadas por varios de los consejeros investigados, quienes cuestionaron el procedimiento utilizado para iniciar el proceso.
Según las fuentes legislativas consultadas, "los diputados rechazarán el planteo de nulidad y luego se reunirá la Sala Acusadora para analizar los dictámenes que presentó la Comisión Investigadora sobre el accionar de los consejeros María Magdalena Iráizoz, Diego May Zubiría, Juan De Stéfano, Carlos Rosenfeld y Bettina Castorino".
Los hechos constitutivos de la causal de mal desempeño determinados por la Comisión Investigadora que preside el diputado macrista Marcelo Godoy (Compromiso para el Cambio) fueron seis, pero sólo se aplicaron cuatro.
En total, la Comisión elaboró cuatro dictámenes. El de mayoría -firmado por ocho legisladores (Godoy, Jorge San Martino, Martín Borrelli, Jorge Enríquez, Miguel Talento, Daniel Betti, Rubén Devoto y Álvaro González)- aconseja a la Sala Acusadora el juicio político a los cinco consejeros, aunque por distintas causales.
Salvando los detalles particulares, en el dictamen se hace mención a los hechos relacionados con el cobro de adicionales por título y antigüedad; la falta de cobertura de cargos empleados y funcionarios del Consejo de la Magistratura, Juzgados, Cámaras y Ministerio Público; la probable negligencia, impericia y/o falta de idoneidad en la gestión del Consejo de la Magistratura.
Otro dictamen, elaborado por los diputados Fernando Melillo (ARI) y Ariel Schifrin (Confluencia) sostiene que es procedente un recurso de nulidad solicitado por varios de los consejeros, ya que la Legislatura "se arrogó facultades de la Sala Acusadora" al votar la apertura del proceso de juicio político. Ocurre que la votación que dio inicio al proceso la realizó el pleno de la sala, por lo que podría considerarse que hubo prejuzgamiento de parte de los miembros que componen la Sala Juzgadora. Además, la Comisión Investigadora de la Sala Acusadora aún no había sido conformada.
Melillo y Schifrin también afirmaron que los cinco consejeros acusados no incurrieron en mal desempeño. Ambos consideran que este Consejo tuvo que actuar en un proceso de transición, y que sus integrantes heredaron una situación caótica de la anterior composición, conducida por Juan Octavio Gauna, cuya gestión está sospechada de corrupción. Sobre esta última, pesa sobre ella una causa judicial que tramita en el juzgado a cargo de Ricardo Warley.
El dictamen firmado por los kirchneristas Silvia La Ruffa y Diego Kravetz (Frente para la Victoria) también aconseja el juicio político pero excluye de la nómina a Rosenfeld.
En tanto, el dictamen de la diputada Sandra Dosch (Frente Grande) desestima los cargos formulados contra los consejeros y pide el archivo de las actuaciones.
Por lo pronto, -y aunque no se debería generalizar ya que se trata de cinco personas diferentes que están cuestionadas por cargos similares pero no iguales- gran parte de los legisladores consultados por esta agencia coincidieron en afirmar que "será muy difícil que la Sala Acusadora logre reunir los votos suficientes para sostener las acusaciones y suspender a los consejeros sin goce de haberes hasta que se expida la Sala Juzgadora".
Para acusar a los consejeros investigados es necesario que haya 30 votos afirmativos, es decir, dos tercios de los 45 miembros de la Sala Acusadora. "Hoy por hoy hay entre 26 y 27 votos, por lo que no se podría seguir con el proceso. Si bien estaríamos a pocos votos de los 30, estimo que las posiciones están muy consolidadas como para modificarse", afirmó en off the record un legislador porteño.
Cabe mencionar que, en un principio, también se había cuestionado a María Celia Marsili, pero ésta renunció a su cargo en el Consejo de la Magistratura, por lo que el proceso en su contra no siguió su curso. En su reemplazo, asumió Jorge Caputo pero el flamante consejero decidió dimitir a ese puesto este martes, por lo que el Consejo quedó con dos integrantes menos de los que debería tener, ya que -junto con Marsili- había renunciado Carlos Balbín y no fue reemplazado.