La derrota de Boca no le impidió al líder de Compromiso para el Cambio, Mauricio Macri, cumplir con sus actividades laborales. Repuesto del traspié futbolístico, el ingeniero se entrevistó con el secretario de Seguridad, Norberto Quantín, para tratar de promover una Política de Estado en materia de seguridad que incluya el parecer de los gobernadores y de la oposición. Según los macristas en el encuentro hubo una fuerte coincidencia en la necesidad de continuar a través de distintas gestiones con las políticas de seguridad que se vayan implementando.
El encuentro se llevó a cabo luego de que Macri le enviara, hace un par de semanas, una carta al ministro de Justicia, Gustavo Béliz. En la reunión, aparte de Quantín y Macri, participaron el responsable de las políticas de Seguridad y Justicia de Compromiso para el Cambio, Eugenio Burzaco y el subsecretario José María Campagnoli.
En la reunión Macri ofreció la colaboración de su bloque de diputados en el Congreso Nacional y del bloque mayoritario que posee en la legislatura para la sanción de aquellas leyes claves, que sean necesarias para disminuir la actual situación de inseguridad.
El político, además aprovechó la reunión para interiorizarse de los detalles del Plan de Seguridad Nacional y para solicitar la creación de una Policía de la Ciudad de Buenos Aires. Sobre este último pedido, Quantín manifestó que no pensaba en un traspaso aunque agregó que la Ciudad se iría haciendo cargo de algunas atribuciones.
Por otro lado, las autoridades de la secretaría dieron una explicación detallada de varios aspectos del Plan, incluyendo las reformas penales y procesales que limitarán excarcelaciones y harán más rápido el accionar de la justicia. También hicieron hincapié en la conducción real que hoy tienen las fuerzas de seguridad y aclararon que la Agencia Federal de Seguridad no será una nueva institución de seguridad.
Cuando, el ingeniero pidió explicaciones por la baja de más de 100 comisarios de alta jerarquía de la Policía Federal, Quantín le aseguró que esos oficiales tenían causas penales o sumarios que ameritaban dicha medida y que en otros casos la decisión corrió por cuenta del Presidente Néstor Kirchner.