Otra es la situación del Yacimiento Carbonífero de Río Turbio (YCRT) que desde noviembre de 2018 y con un presupuesto de 870 millones de pesos alcanza una producción mensual de 30 mil toneladas de manera sostenida.
Esta misma cifra es la que se producía anualmente durante el gobierno de Cristina Fernández pero con un presupuesto que llegó a los 3.500 millones de pesos al año y cero ventas.
Río Turbio supo ser una mina carborífera importante desde los 70 hasta los 90’. Sin embargo, a principios de los 2000, su producción fue bajando de la mano de políticas de desabastecmiento. La maquinaria que se adquiría era guardada como llegaba del puerto en galpones del predio, así como fue la excusa de sobreprecios extraordinarios y de desvíos de fondos durante los gobiernos kirchneristas.
Pero el evento que terminó de oscurecer su historia fue el terrible accidente que terminó con la muerte de 14 mineros en 2004. En este sentido, Ramón Rivero, jefe de turno del área de Preparación Principal comentó: “Estuvimos más de diez años sin producir de forma continua y eso afectó la cultura del trabajo. Además se jubilaron muchos de los viejos con experiencia y esa información se perdió”.
Omar Zeidan, el actual interventor designado por el Gobierno Nacional en 2016 informó que le pidieron que llevara adelante una auditoría, que pusiera en marcha la empresa y que la volviera sustentable. “Y va a ser sustentable”, asegura. Respecto del resurgimiento de este importante yacimiento, las autoridades comunicaron sus estimaciones para el 2019: al cumplirse el año de producción continua se habrán sacado unas 360 mil toneladas de material que significarán ingresos de US$ 12 millones.
A su vez, para 2020 planifican llegar a las 500 mil toneladas y al millón en 2025. Mientras que ara 2020 superarían los US$ 24 millones. Además, la empresa Yacimientos Carboníferos Río Turbio le propuso este mes al gobierno de Alicia Kirchner ocupar la capacidad de su Usina Carboeléctrica de 21 mw para brindar energía a los hogares de Río Turbio, Julia Dufour y 28 de Noviembre a un valor 33% menor que el que pagan en la actualidad.
“Se trata de brindar servicios y bienestar a la gente de la cuenca, un lugar ciertamente postergado. Desde la empresa de energía y de nuestra parte, existe plena voluntad para que los habitantes de la cuenca carbonífera puedan estar contenidos dentro de esta medida que permitirá a muchos vecinos vivir mejor y llevar más alivio a sus
salarios”, indicó el interventor Zeidán en un comunicado.