Sorpresa en la interna Demócrata: el ganador menos pensado

Sorpresa en la interna Demócrata: el ganador menos pensado

Pete Buttigieg, el postulante de 38 años y abiertamente homosexual, cosechó el 71% de los votos en los caucus de Estados Unidos.


Se hicieron esperar, pero finalmente se dieron a conocer los resultados de las primarias demócratas, conocidas como “caucus”, es decir, el primer paso para elegir el candidato demócrata que enfrentará al actual mandatario estadounidense Donald Trump en noviembre. 

Se trata de Pete Buttigieg, opuesto a Donald Trump. El candidato de 38 años, abiertamente homosexual -en el 2018 contrajo matrimonio con Chasten Glezman-, y militar retirado -fue a la guerra de Afganistán-, Buttigieg ocupó desde el 2012 y hasta el pasado 1 de enero la alcaldía de South Bend, una ciudad de 101.000 habitantes situada en el norte del estado de Indiana.

Buttigieg cosechó el 71% de los votos de los distritos electorales escrutados.

Le sigue muy de cerca Bernie Sanders, el gran candidato izquierdista, y favorito en las últimas encuestas para los «caucus» de Iowa, con un 25,2%. La también izquierdista Elizabeth Warren aparece en tercer lugar, con el 18,4%, y el gran perdedor de la noche, el ex vicepresidente Joe Biden, cae al cuarto puesto con un 15,4%.

En el voto popular, Sanders (26%) tiene algo de ventaja sobre Buttigieg (25%) y mayor distancia frente a Warren (20%) y Biden (13%).

El partido demócrata de Iowa empezó a divulgar resultados a las 16.00 hora local del martes (23.00 de España) con el 62% escrutado, después de que un error técnico en una aplicación digital para la transmisión de los resultados invalidara el recuento y hubiera que repetirlo a mano.

Acerca de Pete Buttigieg

El alcalde supo sobrepasar su juventud, su falta de experiencia nacional y su déficit de notoriedad en la campaña desde que hace un año decidió participar en la carrera demócrata a la Casa Blanca.

Además, el demócrata que competirá con Trump es un orador excelente y ha destacado por su tono calmado y confiado, y su aparente conocimiento de los temas clave, poniendo de relieve su experiencia militar. Pasó seis meses en Afganistán. Se las ha apañado para aparecer como un ‘outsider’ creíble frente a sus rivales demócratas.

De hecho, no se ha cansado de repetir que su condición de recién llegado a la política nacional no es única en la historia de las elecciones presidenciales. Y lo ha presentado como una garantía. “Cada vez que mi partido ha llegado a la Casa Blanca en los últimos 50 años, lo ha hecho gracias a un candidato nuevo en la política nacional, centrado en el futuro, no moldeado por el estilo de vida de Washington y allanando el camino para una nueva generación”, dijo en un mitin el pasado fin de semana en Waterloo, Iowa.

Ha presentado algunas posiciones progresistas, pero está convencido de que sus opiniones más moderadas sobre la cobertura de salud y los impuestos podrían convencer a los votantes centristas, especialmente a los independientes y republicanos que votaron por Trump pero que ahora desean una opción alternativa para poner punto final a una presidencia marcada por la división política.

Traducir su triunfo en Iowa en un éxito electoral más amplio será una tarea titánica. A pesar de su impresionante capacidad para recaudar fondos, las encuestas nacionales solo lo colocan en quinta posición por su déficit de notoriedad en comparación con los candidatos más conocidos como Joe Biden o Bernie Sanders.

También adolece de un apoyo muy débil entre los votantes negros, un electorado clave para los demócratas.

En los últimos meses, este joven graduado en Harvard y que habla siete idiomas, ha preferido enfatizar su fe cristiana en lugar de su matrimonio con un hombre.

Te puede interesar

Qué se dice del tema...