El hecho es llamativo y preocupante la repetición. Por eso, la manifestación del peronismo fue tan dura. El Partido Justicialista de la Provincia de Buenos Aires expresó su repudio “al segundo atentado con armas de fuego que sufrió la sede del peronismo en la ciudad de La Plata en tan solo 10 días”.
El lunes, la fachada de la sede del partido, ubicada en la calle 54 entre 7 y 8, recibió un impacto de bala por segunda vez en dos semanas.
En un comunicado, el peronismo -que en el territorio bonaerense conduce el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray- manifestó su “creciente preocupación por la reiteración de hechos de violencia política contra el principal partido opositor de la capital de la provincia y exigimos a las autoridades, tanto provinciales como locales, la adopción de medidas que aseguren el libre ejercicio de la democracia”.
“Agradecemos, a su vez, a los distintos partidos políticos que ofrecieron sus muestras de solidaridad y condena frente a este acto de intolerancia cobarde y autoritario, que no conseguirá callar la voz de quienes militamos por la independencia económica, la soberanía política y la justicia social”, plantearon.