“Quiero que el vecino porteño sienta que desde el Gobierno estamos cerca”

“Quiero que el vecino porteño sienta que desde el Gobierno estamos cerca”

Facundo Carrillo, secretario de Atención y Gestión Ciudadana, le explicó a Noticias Urbanas cuáles son las nuevas directivas de esta cartera recién creada por el Ejecutivo.

Facundo Carrillo.

Con mate en mato, Facundo Carrillo recibió a Noticias Urbanas en la sede de Gobierno en Uspallata, Parque Patricios, eligió un lugar sereno en este gigante vidriado y se presentó.

El recién asumido secretario de Atención y Gestión Ciudadana de la Ciudad ya lleva un largo recorrido en el distrito porteño: se desempeñó como subsecretario de Demanda Ciudadana, Calidad y Cercanía y mantiene una licencia como presidente de la Comuna 2 (Recoleta) para cubrir este puesto, entre otras cosas.

Se trata de la cartera que suplanta a la exSecretaría de Descentralización, a cargo entonces de Sergio “Chiche” Constantino, quien a su vez migró a la cartera de la Tercera Edad.

Según Carrillo, “el proceso fuerte de descentralización ya pasó” y ahora los planes del Gobierno porteño es “hacer acupuntura” con temas puntuales que aquejen a los vecinos de la Ciudad.

A propósito del amplio triunfo de Vamos Juntos en la Capital, el funcionario del Pro aseguró que se trata de un buen signo, ya que “los argentinos quisieron salir del círculo vicioso en el que veníamos”. Fue, precisamente, Recoleta uno de los barrios donde Elisa Carrió cosechó más votos.

Así como “Mauricio trajo un cambio de visión y tendencia”, Carrillo llega también para implantar su impronta.

 

-¿De dónde venís y cómo llegás a ser secretario de Atención y Gestión Ciudadana?

-Empecé a estudiar relaciones públicas por el año 2001, y fue cuando nos atravesó una de las mayores crisis políticas, institucionales y sociales más importantes de nuestro país, que fue en el momento en que cambiábamos de presidente como de ropa. Y esto llevó a que en la mesa con mi familia, en la facultad y en encuentros con amigos, todos opinaran de lo mal que estábamos. Y no quise quedarme en el lugar de la queja y la catarsis, sino que quise hacer algo al respecto.

Yo era muy chico pero ya había visto varias facetas de la política: mi padre sufrió bastante la política porque tuvo que exiliarse; mi abuelo fue ministro de Salud Pública de Perón en su primer y segundo gobierno, se exilió en el ’55 cuando mi padre tenía un año, y luego murió exiliado. Después de varios años mi padre pudo volver al país, y a mi madre le pasó algo muy parecido.

Todo esto me interpeló, y le comenté a mi familia que quería hacer algo en política, lo cual no recibieron muy bien porque claramente habían quedado reticentes a las cuestiones políticas, mayormente por miedo, y yo tenía apenas 19 años.

Mauricio Macri, que entonces era presidente de Boca, invitaba a todos a que se metieran en política porque de esa situación había que salir todos juntos, y fue entonces cuando empieza mi empalme con lo que sería luego el Pro.

 

-¿Siempre tuviste esta inclinación por lo social y el contacto con el vecino?

-Sí, en realidad, en aquel momento por donde entré a este espacio, caí donde caí. Pero estoy feliz con eso porque me gusta mucho el vínculo con las personas y con los vecinos. Que yo pudiera ser el representante de Mauricio en el barrio donde yo nací, Recoleta, para juntar adeptos y demás, me parecía muy divertido. Así que me dediqué a eso desde el 2005 hasta que fui elegido director del Centro de Gestión y Participación Comunal, en el 2007. Estuve todos esos años como voluntario, después fui coordinador de voluntarios, más tarde fui secretario de Juventud y secretario General de la Comuna 2, todo esto ad honorem. Y luego, cuando ganamos las elecciones en el 2007, terminé quedando con 25 años como director de esa comuna. Ahí estuve cuatro años, hasta que Mauricio convocó a las primeras elecciones de comunas y ahí me postulé como candidato a presidente de la Comuna 2, y gané.

-¿Cuáles son las principales preocupaciones de los vecinos o temas en cada comuna?

-Hay temas que son frecuentes a todas las comunas y algunos que son específicos. De los temas comunes vemos que veredas, poda y en relación a este último, la mejoras en la iluminación están dentro de los cuestiones que los vecinos demandan una mayor atención. Desde la Ciudad estamos avanzando en cada uno de estas preocupaciones, por ejemplo está vigente un plan maestro por el cual se va a reemplazar la iluminación de todas las calles de la Ciudad por luces LED más potentes, duraderas y sustentables para 2019. Respecto de las veredas, realizamos un cambio con la creación de una Subsecretaría nueva que va a concentrar toda la información de las obras en la Ciudad y nos permitirá sumar mayor eficiencia y por tanto mayor capacidad de acción. Finalmente, tenemos para 2018 un plan de poda integral que entendemos permitirá dar respuesta a la demanda que nos plantean lo vecinos.

-¿Cón qué visión se regirá tu gestión en esta Secretaría?

-La visión que yo vengo a tratar de dar es de cercanía y vínculo con el vecino, entendiendo que las comunas son el primer contacto directo y nexo con el Gobierno, permitiéndole a éste entablar una sintonía fina con el día a día del vecino.

-Esta secretaría es la que recepciona las demandas vecinales y, por ende, el enojo y necesidades de algunos porteños, ¿cómo se sobrelleva esta parte?

-Los primeros cuatro años de presidente de comuna tuve altibajos emocionales porque uno ve a la persona, la necesidad y el problema en primera persona y cuando se actúa en consecuencia, uno ve cómo impactó en su vida.

La contracara de esto es que la demanda por definición es infinita y siempre va a ser mayor a lo que uno pueda dar, sino los gobiernos no serían necesarios.

Además, cuanto más uno hace, abre la posibilidad a más demandas, lo cual está buenísimo porque hace que todo funcione mejor y evolucione.

Entonces, cuando yo no podía brindar una solución rápida, me angustiaba, porque yo veo las necesidades en carne y hueso, no son números en una planilla. Y a veces esas soluciones no dependen de mí.

Yo lo que quiero es que el vecino sienta que está cerca, que las comunas son un canal de atención con un nivel de respuesta bueno, eficiente y rápido, es lo que buscamos en este nuevo proceso. También queremos que, si bien cada comuna tiene sus características y necesidades particulares,  todas tengan el mismo nivel de prioridad por parte del Estado.

 

-¿Qué tiene para decir de la gestión de “Chiche” Constantino que te antecede?

-La gestión anterior de Chiche ha sido muy buena, ha hecho infinidad de obras. Nosotros ahora que retomamos la gestión de él vimos que hizo obras por todos los barrios y comunas. La verdad es que estas obras hablan por sí mismas, la gente las disfruta por sí mismas y no hace falta salir a contarlas, pero queremos darle más difusión para que también gente de otros puntos de la Ciudad se enteren de todo lo nuevo que hay. Quiero cambiar un poco esa dinámica, Chiche tenía un perfil más bien bajo y lo respeto por eso. Yo creo que la gente que tiene perfil bajo terminan siendo la más inteligente. Chiche es una máquina de hacer, que una vez que terminó algo ya está pensando en algo nuevo y no se preocupa tanto en contarlo. Son estilos. Nosotros somos más de contar lo que hacemos, para quién lo hacemos y demás, porque utilizamos recursos de los vecinos para hacer algo y creo que es sano que sepan la razón de cada cosa.

-Ahora sumaron una app BA147 para demandas online, ¿cómo administran tantas demandas y a cuáles les dan prioridad?

-Las demandas de los vecinos antes se tomaban como únicas y en muchos casos eran repetidas. El primero que entraba era al primero que atendíamos. Lo que hacemos desde el año pasado es cambiar un concepto, al que nosotros llamamos Gestión Colaborativa, que en vez de basarse en casos puntuales o tickets, se basa en las incidencias, es decir, en lo que la gente pide. Entonces, todo lo que los porteños solicitan es una información que convertimos en pública, lo cual permite que cuando un vecino quiera cargar una solicitud o demanda, vea lo que otros vecinos pidieron. Si una demanda ya está hecha, lo que se puede hacer es sumarse a esa solicitud, reforzándola, y eso aumenta el nivel de priorización dentro de la operación nuestra de la secretaría.

Esto desembocó en tres cosas importantísimas: que los vecinos dentro del ecosistema en el que se muevan, así sea su manzana o su barrio, van priorizando qué temas son los más importantes y eso a nosotros nos entra como información. Lo segundo es que nosotros dejamos de ver cientos de miles de tickets, para ver problemas concretos asociados a una cierta cantidad de gente que está pidiendo tales cosas.

Y el tercer beneficio es que esto a nosotros nos permite organizar nuestras prioridades, y arreglamos primero los puntos de dolor que genere más demandas.

Y después, en términos de operación, nosotros firmamos “niveles de servicio” con cada una de las áreas para que, una vez tipificadas todas las demandas de los vecinos de la Ciudad, veamos quién es el responsable de dar una solución a eso y firmamos un común compromiso de nivel de servicio.

 

-¿A qué se debe el cambio de nombre de tu cartera? ¿Cómo se seguirá tratando la descentralización?

-Yo creo que el proceso fuerte de descentralización ya pasó. Y considero que el desafío ahora es hacer que esas competencias comunales descentralizadas se mejoren. Lógico que quedan cosas por descentralizar y estamos evaluando y ajustando para darle un mejor servicio al vecino. Ahora estamos haciendo acupuntura con temas muy puntuales, ya que los temas más fuertes ya fueron descentralizados.

Mi secretaría tiene una subsecretaría de Gestión Comunal, donde se busca que las 15 comunas heterogéneas mantengan un mismo propósito y objetivo. Las comunas son una herramienta institucional muy importante porque nos mantiene en cercanía con los vecinos. Y por eso cambió el nombre, porque queremos puntualizar en cada tema de la Ciudad.

Yo diría que hay etapas, y estamos en la cuarta. Tuvimos la primera, de un año y medio, que arrancó con la conformación institucional las comunas con el acto eleccionario, la formación de la junta y el Consejo Consultivo Comunal. La segunda etapa fue todo el proceso de descentralización, que fue marcada por el traspaso de competencias que antes eran del Poder Ejecutivo central, como el arbolado, espacios verdes, el poder de policía en la utilización del espacio público, luego algunas cosas de bacheo, veredas y tránsito en algunos aspectos.

Y ahora queremos ver, por un lado, qué cosas puntuales se pueden seguir descentralizando que le aporten valor a las comunas y al vecino; y por el otro, la homogeinización de la gestión de las 15 comunas.

Las comunas le aportan al Gobierno todo lo que éste no puede ver por volumen de población en términos de necesidades sociales, en cambio la comuna lo detalla con nombre y apellido. Y en esta Ciudad tenemos la suerte de que los 15 presidentes de comuna sean del mismo espacio político y que en la mayoría también hay una mayoría en las juntas comunales, lo cual nos permite apoyarnos bastante en ellas en términos de gestión.

 

-¿En qué aportaría el plan del Gobierno de gerenciar las comunas?

-Las estructuras de gerencia en las comunas es algo que yo como Presidente de comuna venía pidiendo. Se vino peleando y avanzando mucho por esto, porque el presidente es el responsable de administración general, según marca la ley, y es el único que tiene firma para todos los actos administrativos, desde unas vacaciones o permiso de salida temprana de un empleado hasta licitaciones de billones de pesos, por lo que está totalmente sobrecargado de trabajo y por sobre todo, sin posibilidad de delegar responsabilidades. Así que creo que este es un gran paso que ayudará mucho al engranaje de las comunas.

-Entendiendo la transversalidad de tu secretaría con casi todos los organismos del Gobierno, ¿cómo beneficia en la operatividad el resultado de las elecciones?

-Por primera vez vamos a tener mayoría en la Legislatura y eso afecta para bien la certidumbre a la hora de planificar y llevar adelante proyectos que uno necesita para hacer cambios profundos. Por lo general, en los principales temas de la Ciudad hubo acuerdo en el Parlamento, pero por ahí lo que debería llevar un par de meses termina llevando un par de años, y los tiempos a veces urgen.

Así que en lo cotidiano, tenemos un poquito más de tranquilidad para llevar adelante proyectos importantes como el del Consorcio Participativo, que es un proyecto que afecta a más de 2 millones de personas en la Ciudad. Estamos convencidos de que habrá un salto cualitativo a todo lo que es el mundo consorcial que venía en una dinámica poco productiva y conflictiva en muchos casos, donde los vecinos se veían rehenes de ciertas situaciones que ahora van a tener una herramienta a ellos salir de esa situación.

-Como miembro del oficialismo, ¿qué significa el amplio triunfo de Elisa Carrió en la Ciudad?

-Desde lo emocional, cuando pasan estas cosas, salvando el 2003 que perdimos en la segunda vuelta, vemos que los vecinos nos siguen apoyando. Cada acto eleccionario es una bocanada de aire fresco y de orgullo de pertenecer a este equipo y de plantearnos dudas sobre el camino que tomamos, esto es un reconocimiento de que vamos bien.

Estoy convencido que de acá a diez años, cuando Mauricio no sea ni presidente, vamos a ver este día como una vuelta de página en la historia de nuestro país. Implica un cambio de liderazgo y valores, y se dieron antecedentes que no se daban en mucho tiempo, en especial desde la vuelta de la democracia, lo que significa que los argentinos quieren salir de un círculo vicioso en el que veníamos, ya que siempre caíamos en el mismo lugar.

Este cambio radical que hicimos diría que excede la Ciudad y hasta el país. A nivel latinoamericano, y sobre todo porque Argentina fue la primera que cambió una tendencia que venía ya hace 15 o 20 años en esta región de una visión más populista y progresista. Mauricio y Cambiemos en general son la primera muestra de un cambio contundente de cambio de tendencia que empieza a desencadenarse en otros países. Argentina, geopolíticamente se convirtió en un actor muy clave para el resto del mundo.

Si tuviera que elegir un distrito que ejemplifica el cambio de rumbo de este país sería la Provincia de Buenos Aires, o Entre Ríos y Chaco. Tanto María Eugenia, como Mauricio y Horacio son líderes que construyen sobre la verdad, lo cual lleva más esfuerzo y más tiempo, porque a veces la verdad no es la que todo el mundo quiere escuchar. Tal como dice María Eugenia, arreglar la Provincia va a llevar años y ella blanquea que si llueve se van a seguir inundando como unos meses atrás. Y que los bonaerenses a pesar de esto reafirmen en las urnas este camino es un doble mérito, principalmente para los bonaerenses. Venimos de todo lo contrario, donde te vendían espejitos de colores y creían que la verdad era piantavotos. El paradigma cambió.

 

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