El lunes pasado, con una conferencia de prensa, las organizaciones de mujeres de Jujuy llamaron a impulsar una jornada nacional de lucha en rechazo al incumplimiento de la interrupción legal del embarazo (ILE) y a la maternidad que impusieron las instituciones estatales a una niña de 12 años violada y embarazada.
Aunque el Código Penal establece desde 1921 que el aborto no es punible en estos casos, y aunque existió un pedido explícito de la niña y su familia, el gobierno de Gerardo Morales, su Ministro de Salud, la justicia y la autoridades del hospital en el que fue internada, no sólo desoyeron la demanda sino que impusieron a la nena una maternidad forzada, sometiéndola a una cesárea.
Con marchas en diversos puntos del país, con pañuelazos en reclamo del aborto legal, con la exigencia de inmediata separación de la Iglesia del Estado, las organizaciones de mujeres volverán a las calles respondiendo al llamado de sus compañeras jujeñas.
En la Ciudad de Buenos Aires, concentrarán desde las 17.30 h frente al Ministerio de Desarrollo Social, del que depende la Secretaría de Salud de la Nación. Allí realizarán un pañuelazo, exigirán la legalización del aborto y marcharán luego a a la Plaza de Mayo, donde leerán un pliego de reivindicaciones como antesala también a la preparación del 8M.
