Maduro le mandó otra carta al Papa para abrir el diálogo con la oposición

Maduro le mandó otra carta al Papa para abrir el diálogo con la oposición

Además, el líder chavista dijo que iba a revisar las relaciones con los países que reconocieron a Juan Guaidó como el presidente venezolano.


En medio de la crisis que atraviesa Venezuela, Nicolás Maduro le envió una carta al Papa Francisco con un pedido de ayuda y con la idea de entablar un diálogo con la oposición. Por otro lado, este lunes venció el ultimatum para que se realicen las elecciones y, además, el líder chavista dijo que iba a revisar las relaciones con los países que reconocieron a Juan Guaidó como el presidente venezolano.

Con respecto al escrito que fue enviado al Sumo Pontífice, Maduro “espera una respuesta positiva” para facilitar las conversaciones con los sectores que exigen su retiro, como también dialogar en pos de resolver la crisis política que atraviesa el país. Cabe destacar que el Papa aún no ha reconocido a Guaidó como presidente de Venezuela.

“He enviado una carta al papa Francisco, espero que esté llegando o que ya esté en Roma, en el Vaticano, diciendo que yo estoy al servicio de la causa de Cristo. Y con este espíritu le he pedido ayuda en un proceso de facilitación y de reforzamiento del diálogo”, señaló Maduro, en declaraciones a la televisión Sky24.

Este martes se conoció la respuesta oficial del Vaticano a una carta de un grupo de expresidentes de América Latina sobre la crisis venezolana, en la que la Santa Sede resalta la importancia de la realización de elecciones “constitucionalmente previstas”. No es la primera vez que el el gobierno de Maduro solicita la intervención del Vaticano para el establecimiento de un diálogo —hasta ahora fallido— entre los grupos políticos en Venezuela.

El pedido del lider chavista hacia el Papa se enmarca en la reunión que mantendrán la Unión Europea y Uruguay en Montevideo, para tratar de abordar la crisis política que se vive en Venezuela, luego de que trasladasen una iniciativa de diálogo a las Naciones Unidas.

El líder católico ha evitado manifestarse a favor de Maduro o Guaidó, ya que considera que sería una intromisión en los asuntos de Venezuela, aunque afirmó que teme un “derramamiento de sangre”.

Durante su reciente viaje a Panamá, se limitó a decir en el último día de la gira que deseaba “una solución justa y pacífica” para la crisis. Mientras que retorno a Roma, añadió que “si necesitaban ayuda” para aliviar la situación, “que se pongan de acuerdo y la pidan”. Pero consideró que sería “imprudente y haría daño” manifestar una posición favorable a alguna de las partes.

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