Sergio Costantino siente orgullo al contar que heredó la pasión peronista de su familia con trayectoria sindical, y luego de años de ser un “militante social”, tal como se define, asegura seguir sirviendo al pueblo porteño, aunque desde otro lugar.
“A pesar de que uno llegue a un determinado puesto, lo importante es seguir siendo uno mismo, no olvidarte quién sos ni qué venís a hacer”, dijo el Secretario de Descentralización, quien recibió a Noticias Urbanas en sus oficinas de Av. de Mayo al 591.
Con sus zapatillas a medio atar y completa simpleza, contó que en el 2002 encontró su lugar de lucha junto al Pro, uniéndose a Compromiso por el Cambio y desde entonces no dejó de codearse con Horacio Rodríguez Larreta, allá por el año 2000.
Ambas facetas, la de la militancia social y la política, crearon al “Chiche” como el “barón de las comunas”: llegó a su puesto con una relación cercana a “muchos” comuneros y con la confianza ganada del Gobierno de la Ciudad.
Siendo el sucesor de Eduardo Macchiavelli, actual ministro de Ambiente y Espacio Público porteño, Costantino es el nexo entre el jefe de Gabinete de Ministros, Felipe Miguel, y las comunas.
Sobre sus espaldas recae el traspaso de competencias de la Ciudad a las comunas y la eliminación de la dicotomía entre el Norte y el Sur porteño, donde las diferencias de poder económico y calidad de vida son “barreras que dividen” y que “Horacio tiene fijado borrar”.
Quince comunas, 105 comuneros. “Creo que la gente no se entera de todo lo que hacemos”, dijo el hombre que mantiene una influencia transversal al grueso de las temáticas de la Ciudad.
-¿Cuáles son los temas centrales que hoy ocupan a la Secretaría de Descentralización?
-La Secretaría se presenta actualmente como materia de consulta a las comunas. Ellas ejecutan y nosotros trabajamos en ayudarlas dándoles una orientación administrativa y legal, además de las herramientas, en algunos casos, para la ejecución de las soluciones.
En particular, trabajamos mucho en la mejora de los espacios verdes que hoy en las encuestas de los vecinos aparece como uno de los temas preponderantes. Sacando los 37 grandes parques que hoy se entablan como espacios públicos, nosotros debemos atender alrededor de más de 600 hectáreas que tienen las comunas.
En este aspecto, trabajamos en poner en valor alrededor de 79 espacios verdes, ocupándonos de su correspondiente mantenimiento, sin contar las plazas, bulevares, parques, plazoletas y demás. Y este año estamos terminando alrededor de casi 45 espacios más.
Además, firmamos un convenio con la UBA que creo que va a ser un cambio en la historia. Con esto, se haría un nuevo censo para poder armar progresivamente una planificación seria y ordenada de los asuntos pendientes de los barrios, y así poder dar vuelta a la Ciudad en cuatro o cinco años. Esto prevé también que al área de arbolado incorporamos inspectores de la facultad, quienes dictaminan y acompañan al procedimiento de la poda.
La descentralización se sigue haciendo día a día en las comunas, tratamos de profesionalizarlas y acompañarlas. Venimos realizando un trabajo arduo en la Ciudad. Sólo en lo que va del 2017 se podaron 38.300 árboles, se cortaron 2.929 raíces, se realizaron 3.270 extracciones y 77.100
intervenciones en veredas. Sólo por mencionar algunos números concretos.
-¿Con qué otras áreas del Gobierno lidia esta Secretaría diariamente?
-Nosotros tenemos una transversalidad con muchas áreas, como el Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte y el de Desarrollo Urbano.
Por supuesto que también trabajamos mucho con las juntas comunales. De hecho, hacemos recorridas para poder dialogar con ellos y buscar consensos. Lo mismo hacemos con cooperativas sociales cuando nos mandan algún proyecto para los lugares vulnerables. Además, trabajamos con deportes, con tercera edad, con todas las áreas.
Para dar una idea, ahora se empezó a hacer un trabajo dedicado a tratar el dengue con lo que nos combinamos incluso con la cartera de Salud, y con el SAME mismo para que ponga algunas bases operativas en algunas comunas y estar entonces más cerca de la emergencia.
-¿Este proyecto del SAME incluye también las villas porteñas?
-Sí, por supuesto. En el marco de la urbanización de las villas de la Ciudad, hay muchos proyectos que se llevarán a cabo con esas zonas, incluso en eso creo que influirá muy positivamente que algunos ministerios se trasladen a las zonas más vulnerables.
En este aspecto, estamos colaborando también con el Operativo Frío, o cuando hay quizás algún desalojo como el del Padelai. Cabe decir que es un lugar que estuvo más de 20 años tomado, que estuvimos trabajando con las familias, y que desde ya fue un desalojo pacífico, y posteriormente también intentamos reubicar a las personas para que puedan obtener créditos y subsidios con el área de Desarrollo Social.
-En este sentido, ¿cómo ves la dicotomía entre el norte y sur de la Ciudad?
-Se trabajó mucho para cerrar esa dicotomía. Horacio está empeñado en derribar la existencia de lar barreras del norte o sur, inclusive no sólo hay que nombrar las obras increíbles que se están haciendo en el Indoamericano o en la Villa Olímpica, sino también toda la transformación de la zona sur en general, y lo que se viene con las urbanizaciones, que hace que las barreras se levanten y sea una sola Ciudad. Obviamente, faltan muchas cosas por hacer pero creo que vamos bien.
Las obras que se están haciendo en la Villa 31 es algo que no tiene precedente, e incluso el plan y programa de viviendas que está generando el IVC y el mantenimiento de esos complejos habitacionales que estaban muy deteriorados es algo que hay que destacar. Y quizás son cosas que no se ven pero que sí le mejoran la vida a los vecinos en sentido de seguridad, habitabilidad y en muchos otros aspectos.
Y, como mencioné, creo también que ayuda llevar las áreas de gobierno a la zona sur, que eso también acerca un poquito más este plan de inclusión.
-Los vecinos de la Villa 20, nucleados en la Mesa de Reurbanización denunciaron que la urbanización no comenzó y que sufrieron efectos colaterales por las obras de la Villa Olímpica a la que el Gobierno no les dio respuesta. ¿Qué les respondería?
-Entiendo que hay procesos que llevan tiempos incómodos, como las licitaciones o adjudicaciones que son la puerta para poder comenzar las obras. Mi apreciación es que el diálogo tiene que existir y que si puede haber alguna mala interpretación o alguna desconexión hay que lograr que se vuelvan a sentar en una mesa y que puedan seguir encontrando soluciones en conjunto. El presidente del IVC es un hombre razonable, al igual que Horacio, por lo que si se reúnen estoy seguro de que encontrarán las respuestas necesarias.
-¿Cómo es tu relación con los jefes comunales?
-Mantenemos un muy buen diálogo y, además, a muchos ya los conocía desde antes de asumir a este cargo por mi experiencia como militante, lo cual permite una relación más fluida. Cada 15 días hacemos reuniones donde discutimos todo tipo de temáticas, que es un proceso donde participan los 15 presidentes y vamos charlando, poniendo metas y es muy dinámico permanentemente. Voy y participo también de juntas comunales. Incluso, cuando nos llaman y nos invitan, participamos también de los consejos consultivos.
Y, acá recibimos gente permanentemente por reclamos, quejas, solicitudes, o el motivo que sea. Con respecto a lo que tengan que ver con las comunas, tratamos de que sea una Secretaría abierta a todos.
-A sabiendas de que los jefes comunales pertenecen al Pro y que no todos mantienen una inclinación peronista como en tu caso, ¿son las diferencias políticamente ideológicas motivo de rispideces?
-Desde ya que a veces hay discusiones, pero en nuestras reuniones intentamos que no haya personalismos.
En mi caso, me formé en lo que es el peronismo, vengo de una familia del sindicalismo y para mí es un orgullo porque esos valores de la política que te enseñan desde chiquito es el estar, ser compañero y brindarse a los demás. El que conduce debe pensar en los demás y no en uno mismo. Como dije, hay muchos presidentes a los que conozco de la militancia, como a muchos otros que los conozco desde hace años. Y entendemos que es importante que se dejen de lado los intereses partidarios de la política y poner el foco en la gente, que es lo más importante.
Creo que es el diálogo lo que está faltando hoy en la política, donde realmente hay que ponerse en la piel del otro, dejando el egoísmo, las mezquindades y el personalismo de lado, porque la política es lo que a veces te lleva a sentir impotencia cuando ves que las cosas no se hacen para la gente. Por eso, voy a seguir yendo a los lugares donde lo necesita el sistema. Y donde diga Horacio que tenga que estar, voy a estar. En esto quiero resaltar al jefe de Gobierno que nos da la posibilidad de trabajar conjuntamente con ellos.
-¿Cuáles son los mayores desafíos de la Secretaría?
-El desafío es, primero, poder dejar un legado que apunte a que se sigan descentralizando algunas competencias como el arbolado, que estamos a punto de poder profesionalizarlo y continuar trabajando de la mano de una institución prestigiosa como la UBA que nos está dando la orientación para que las comunas puedan tener sus estructuras y las herramientas óptimas para poder resolver todas las competencias que tienen.
Queremos que los vecinos puedan discutir con sus comunas las obras de sus barrios y así elevarlas al Ejecutivo para que éste pueda materializarlas. Eso se empezó a hacer con el área de Participación Ciudadana y se va a llevar a cabo en el 2018.
También quiero que las sedes comunales puedan resolverle todos los problemas de atención y solicitudes de los vecinos.
Aspiro a poder seguir teniendo ideas innovadoras que van más allá de las comunas, por ejemplo, como en la Comuna 8, donde hicimos el Parque Indoamericano, que pretendemos que sea uno de los mejores parques de la Ciudad.
El trabajo allí realizado fue compartido con Nación, y poniéndonos de acuerdo en 2 meses de trabajo pudimos obtener una financiación de alrededor de 220 millones de pesos. Será un parque disfrutado por toda la zona Sur de la Ciudad, sino también tendrá un área deportiva donde todos los chicos de los establecimientos educativos de la zona van a poder hacer actividades deportivas.
Es un lujo de primera calidad, ya que también tendrá un Centro de Integración Social, que será el más grande de la Argentina, donde podrán participar activamente más de mil chicos por día. Y las áreas deportivas van a poder recibir entre 5 y 10 mil chicos a diario.
Lo importante es también que hay casi 200 hectáreas aproximadamente que se municipalizan abarcando el arbolado como el espacio verde en lo que son las Comunas 8 y 9. Es un lujo cómo se fue capacitado el personal encargado de estos espacios, y cómo les fueron dadas las herramientas necesarias para un trabajo óptimo.
-¿En qué estado se encuentra la transferencia de competencias de la Ciudad a las comunas hoy?
-El traspaso consta en darle el dominio a las comunas del arbolado y espacios verdes, atención al vecino, obras comunales, poder de policía, poda, planificación, participación en algunos operativos de ocupación del espacio público, etc.
Se trabajó mucho también en materia de descentralización el tema de los permisos para la realización de distintas actividades y números de registro a las entidades de bien público. Se canaliza a través de ellas también los reclamos del 147 -atención al público-, y funcionan muy bien en las sedes comunales lo que son las licencias, registro civil, residencias y demás, que es una autoría que antes no tenían. Creemos que esto va muy bien, que es el camino correcto, lo comprobamos y queremos seguir consolidándolo.
-El viejo proyecto de crear un Centro Integral de la Mujer por comuna aún no se ha logrado, ¿es la violencia de género un tema recurrente en sus reuniones con las juntas comunales?
-En sí, las CIM son dependientes del área de Hábitat y Desarrollo. Hay algunas comunas que ya tienen los CIM, y la idea es poder trabajarlos y de hecho incorporamos en las sedes comunales no sólo áreas de la mujer, sino también de la niñez, y todas estas cuestiones.
Si bien estamos muy fuertemente abocados a todo el tema operativo de las comunas, el tema de género sí es charlado con frecuencia. Vamos a inaugurar en las próximas semanas estas oficinas especializadas en la Comuna 3, y se irán multiplicando en los diferentes barrios porteños.
En este sentido, tenemos un ida y vuelta muy bueno con la ministra Guadalupe Tagliaferri, así que sé que vamos a tener todo el aval para seguir tratando este tema y que realmente lleguemos a que haya Ni Una Menos.
-¿Cuál cree que es uno de los temas más urgentes de la Ciudad?
-Creo que hay mucho por hacer, pero el tema de la seguridad es primordial. Hay muy buena relación con los jefes de cada dependencia policial. Participamos todos los primeros jueves de cada mes de las Comisarías Abiertas, lo cual se convierte en un punto de encuentro para seguir poniéndonos de acuerdo en cómo tratar este tema. Van comuneros y todos los funcionarios, entonces salen a flote los problemas no sólo de inseguridad sino también del espacio público. Así es cómo nosotros aportamos desde nuestro lugar, como desde la luminaria, que es necesario despejarla a través de la poda, manteniendo una Ciudad bien iluminada. Y así como surge esto, surgen muchas cosas en las que nosotros aportamos.
Hay un mapa del delito que el ministro Ocampo abrió a la sociedad, y lo tenemos en cuenta a la hora de actuar. Por mi parte, yo estoy yendo a la comisaría 19, que acapara las cuestiones habituales de Palermo, Recoleta y zonas aledañas como robos, y tengo que destacar que en estos encuentros hay una participación muy activa de los vecinos.
En inseguridad, además, se está haciendo un gran trabajo desde el equipamiento de los policías para poder sacarlos a la calle, eliminando las tareas administrativas que pueden ser ejecutadas por civiles. En este sentido las comunas son un actor muy activo para poder mantener un diálogo con el jefe policial.
-¿Cuál cree que es una de las debilidades de la Secretaría?
-Creo que hay muchísimo trabajo que no se ve, y es que quizás la Secretaría no trata de ser marketinera. El éxito de esta Secretaría es el éxito de las comunas y estoy orgulloso de las cosas que hacemos. Yo creo que la gente se termina enterando de lo que hacemos cuando lo disfruta.
Mantenemos un muy buen equipo de trabajo. Un claro ejemplo de esto es el conceso que logramos con el proyecto de refacción del Corralón de Floresta, donde se hará una plaza que vienen pidiendo los vecinos hace muchos años. Dentro de ese lugar había casi 19 organizaciones culturales que dictaban allí cursos y talleres, además de los vecinos.
Por eso reunimos a todos en la Comisión de Descentralización con las legisladoras Paula Penacca, María Rosa Muiños por Espacio Público, los comuneros, los vecinos, y Mariela Patiño, que es la directora del proyecto.
Así, logramos escucharnos todos y sacar un proyecto espectacular. Como ley, estaba estipulado hacer una plaza pública, y nosotros destinamos una franja de este espacio a hacer una movida cultural. También se acordó hacer un espacio para que hagan educación física los alumnos del colegio que está al lado, un anfiteatro, una lateral con oferta cultural, una huerta, y un mural de la memoria por toda la historia de ese lugar, entre muchas otras cosas. Y creo que este es el camino. Tal vez la gente no se entera de todo esto, pero quiero que se enteren cuando se crucen en sus barrios con más mejoras.