Desde hace meses la diputada nacional, Margarita Stolbizer, viene denunciando distintas irregularidades en el patrimonio de la ex presidente, Cristina Kirchner. Si bien, la imagen de la ex jefa de Estado viene disminuyendo desde antes que el Frente para la Victoria perdiera los comicios de 2015, la diputada a partir de esta maniobra comenzó a aumentar su buena imagen y credibilidad en parte de la sociedad.
Por otra parte, Stolbizer, luego de haber obtenido un porcentaje muy bajo en las últimas elecciones, donde fue candidata a Presidenta de la Nación, busca capitalizar esto y mejorar su estrategia política de cara a los comicios de 2017.
La diputada y el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, comenzaron a construir un pacto electoral para competir con el oficialismo de la Provincia de Buenos Aires, que además deberá enfrentar al núcleo más duro del kirchnerismo y al peronismo que aún no ha encontrado un rumbo concreto, después de alejarse del Frente para la Victoria.
No todo indica que esto sea una buena señal para Stolbizer, ya que si bien, el contrapunto directo con la ex presidente conlleva el crecimiento de su imagen, por otro lado, el acercamiento con Massa hace que esa misma imagen disminuya ya que lo vinculan con un pasado, el Frente para Victoria, del cual su aliado electoral formó parte durante algún tiempo.
A Margarita la grieta la afecta porque debe enfrentarse tanto al electorado de Cambiemos como al del kirchnerismo, o lo que queda de él. Las ambigüedades nunca son buenas pero si algo ha dejado como legado el kirchnerismo, es la división en la sociedad, que hoy sigue casi tan dividida como durante los últimos años.
Justamente, ese será el desafío que la líder del GEN, que deberá superar para los próximos comicios, acertar en sus alianzas para que su partido no pierda representación en el Congreso de la Nación.
